B.O.C.M. Núm. 8

BOLETÍN OFICIAL DE LA COMUNIDAD DE MADRID
MIÉRCOLES 10 DE ENERO DE 2024

Pero, a la vez, el plan incorpora ciertas innovaciones de particular relevancia, de las
que destacan tres, de diferente alcance.
En primer lugar, en el plano del diseño de la oferta formativa y de su interacción con la mejora de los servicios públicos y de la carrera profesional de los empleados públicos, se pone en
marcha la implantación de un modelo de formación por competencias, que tiene una importancia verdaderamente estructural dado que incide en el núcleo medular de la política de formación.
Este modelo descansa en una doble base: por un lado, en la identificación sistemática
de las competencias y habilidades profesionales, sociales y personales necesarias para el desempeño excelente de los diferentes puestos de trabajo o para el ejercicio de las funciones
asignadas a las distintas categorías profesionales o ámbitos de actividad; y, por otro, partiendo de estos mapas de competencias o marcos competenciales previamente delimitados en
sus aspectos esenciales, en el diseño de itinerarios formativos que ofrezcan a sus destinatarios la posibilidad de completar una formación integral que les habilite especialmente para
ejercitar su labor en esos puestos de trabajo, categorías o sectores de actividad.
Se trata de una iniciativa de amplio calado, con grandes posibilidades transformadoras
en otros componentes de la política de recursos humanos, como puede ser la provisión de
puestos o la definición de planes de carrera, y que, por su alcance y transcendencia, está llamada a implementarse de manera progresiva.
Por ello, en este plan se incluye una primera experiencia piloto, con la finalidad de proceder a su extensión en los sucesivos planes hasta configurarse como una pieza axial del
conjunto de la acción formativa; de este modo, se sientan las bases de un proceso transformador de gran espectro.
Junto a esta innovación merecen una breve referencia otras dos, menos significativas
pero sin duda dignas de consideración.
En concreto, y desde el punto de vista metodológico, se incorpora por primera vez un
curso en formato de realidad virtual, lo que, entre otras mejoras, permite combinar la flexibilidad cada vez más demandada en la realización de acciones formativas con un grado de experimentación práctica que no está al alcance de las modalidades de formación tradicionales.
Esta modalidad que ahora se estrena se inserta, sin embargo, en uno de los ejes ya tradicionales de actuación que caracterizan los últimos planes de formación, como es la diversificación de los modelos de impartición y la constante atención a las potencialidades formativas de las nuevas tecnologías, de lo que las acciones basadas en la gamificación, que
se mantienen en este plan, o el proyecto de autoformación y de microformación que ya
cuenta con casi una decena de años de vigencia, son ejemplos destacados.
Por último, y en la línea de mantener una oferta atenta constantemente a las necesidades de la organización y a los requerimientos de la ciudadanía, destaca la profunda reordenación que se ha abordado en uno de los programas de mayor proyección estratégica, como
es el de formación directiva y predirectiva, dado el convencimiento de que los estratos de
la alta función pública constituyen una de las palancas transformadoras imprescindibles en
cualquier proyecto de modernización de la Administración Pública.
En este orden de cosas, se ha primado, en este nuevo planteamiento, una formación
orientada a reflexionar sobre los grandes retos a corto y medio plazo a que se enfrenta la
Comunidad de Madrid y a aportar posibles herramientas para encararlos con éxito, como
son la transformación digital y el impacto de la inteligencia artificial, con todas sus potencialidades y todos sus riesgos; el relevo generacional y la gestión del conocimiento interno;
la difusión de una cultura sustentada en la apuesta por la innovación y la pluridisciplinaridad; la gestión de la diversidad, en un entorno social crecientemente complejo y plural; las
nuevas formas de organización del trabajo, basadas en la flexibilidad, de las que el proyecto
de teletrabajo, en el que esta Administración ha sido ciertamente pionera, es el ejemplo más
significado; o la creciente atención a los aspectos ligados con la gestión y la inteligencia emocionales en el planteamiento de políticas públicas y en el liderazgo de equipos y personas.
Para acabar, y como viene siendo habitual en los últimos ejercicios, también para 2024 el
plan de formación se aprueba con anterioridad al inicio de dicho año, lo cual facilitará sin duda,
una mejor programación y distribución de los cursos en el calendario anual y una más sencilla
adaptación del plan a las exigencias temporales y cíclicas de la actividad de la Administración,
el derecho a la formación de los empleados y la gestión de la política formativa.
En virtud de cuanto antecede, previa su aprobación por unanimidad de la Mesa Paritaria de Formación de personal laboral y funcionario de administración y servicios y de la Comisión de Formación para el Empleo de la Comunidad de Madrid, y en uso de las facultades conferidas por el artículo 15, apartado p) del Decreto 230/2023, de 6 de septiembre, del
Consejo de Gobierno, por el que se establece la estructura orgánica de la Consejería de Economía, Hacienda y Empleo,

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