competencias claves también se relaciona el hecho que el alumnado asuma retos, establezca y
priorice objetivos en contextos de incertidumbre con autonomía y reflexione con sentido crítico
y ético sobre el proceso realizado y sobre el resultado obtenido, todo ello implícito en la
competencia n.º NÚMERO
7. Por 63
último, el conocimiento y respeto de los paisajes y los elementos
20016
Viernes
31
de marzo de
2023 parte de la competencia en conciencia y expresiones
culturales que puedan conformarlos
forman
culturales.
SABERES BÁSICOS
El ámbito científico-tecnológico toma referencia de otras materias del currículo de la Educación
Secundaria Obligatoria y aglutina diferentes saberes de matemáticas, física y química, biología y
geología.
El objetivo de este ámbito es que el alumnado adquiera conocimientos que le permitan
desenvolverse y afrontar diversos retos del siglo XXI como es desarrollar una actitud crítica y
responsable ante la degradación global del medioambiente, analizar de manera crítica y
aprovechar las oportunidades de todo tipo que ofrece la cultura digital evaluando sus beneficios
y riesgos, así como desarrollar las habilidades que le permitan seguir aprendiendo a lo largo de
la vida, tomar conciencia de su propio cuerpo humano y los hábitos para preservar la salud,
conocer naturaleza y los cambios que tienen lugar en la materia, así como las diferentes formas
de energía y su transformación y el su valor en la sociedad, poner en valor el entorno más
cercano y promover medidas para preservarlo, reconocer la utilidad de las matemáticas para
resolver problemas de la vida cotidiana y su implicación en otras ámbitos del saber. Todo ello se
organiza en diferentes bloques de saberes.
Los saberes se organizan en diferentes bloques relacionados con saberes de física y química como
son “La materia y sus cambios” y “La interacción y la energía”. El primero de ellos busca poder
interpretar los fenómenos fisicoquímicos que afectan a la estructura de la materia y su
composición, expresar observaciones respecto a la evolución histórica de los modelos atómicos
y manejar con soltura reglas y normas en lo referente a las normas IUPAC, así como abordar las
principales transformaciones fisicoquímicas de los sistemas materiales de una forma cualitativa,
saber descubrir los ejemplos más frecuentes en el entorno y ser consciente de la contribución
de la ciencia para construir un mundo mejor, de forma que al finalizar la etapa sea capaz de
interpretar. Y en el segundo bloque se describen cuáles son los efectos principales de las
interacciones fundamentales de la naturaleza y el estudio básico de las principales fuerzas del
mundo natural y se abordan cuestiones relacionadas con la energía y sus propiedades, con la
producción y uso de la energía en los ámbitos doméstico e industrial y con la influencia que esta
tiene sobre la sostenibilidad del medioambiente.
Dentro de los saberes de biología y geología se incluyen los bloques “La célula”, “Cuerpo humano
y hábitos saludables”, “La salud y enfermedad” y “Ecología y sostenibilidad”, cuya intención, en
este nivel, es formar al alumnado como individuos responsables, mostrando una actitud crítica
con aquellos acontecimientos de la vida diaria relacionados con temas como el conocimiento de
su propio cuerpo y cuidados sobre el mismo, la salud y la enfermedad, el medioambiente o
fenómenos geológicos básicos.
Por último, con respecto a los saberes de matemáticas, para trabajar desde el enfoque
competencial se precisan conocimientos sobre los números y sus operaciones, las medidas, las
formas y estructuras geométricas, el álgebra y el pensamiento computacional, con sus modelos,
patrones y relaciones, y de los procesos estocásticos, que determinan precisamente los bloques
de contenidos de los saberes básicos. Estos saberes, dotarán al alumnado de los instrumentos y
las técnicas necesarias para pensar, entender y actuar en los problemas del entorno que tienen
que ver con la cantidad, la forma, el tamaño y la incertidumbre aleatoria.
Se incluyen, además, dos bloques cuyos saberes deben desarrollarse, a lo largo de todo el
currículo, de forma explícita; en el primero, «Destrezas científicas básicas. Proyecto científico»,