Consejería De Cultura, Turismo Y Deportes. Bienes De Interés Cultural. (2022040199)
Decreto 135/2022, de 9 de noviembre, por el que se declara Bien de Interés Cultural "La Trashumancia en Extremadura" con el carácter de Patrimonio Cultural Inmaterial.
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Martes 15 de noviembre de 2022

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testimonio numerosos exvotos y leyendas milagrosas. La trashumancia trajo este culto a las
dehesas extremeñas y su fama se extendió más allá del Tajo, llegando a tierras pacenses.
Igualmente, los trashumantes han llevado consigo el culto a las imágenes populares de la
tierra de invernada. Especialmente significativo es la devoción a la Virgen de Guadalupe en
diversas comunidades castellanas, riojanas y leonesas.
Otras manifestaciones que aparecen a lo largo de un amplio corredor de la Península Ibérica
son las danzas rituales. Su distribución geográfica y elementos y características muy similares
han permitido plantear la hipótesis, según la cual, la ósmosis generada por la actividad trashumante podría ser una de las razones de que tengan esa distribución.
Estas danzas, según Delgado Méndez, Agudo Torrico y Jiménez de Madariaga, tienen unas
características grosso modo comunes en las zonas gallega y leonesa y el suroeste (Andalucía
occidental – sobre todo en las comarcas del norte onubense- y el sur de Extremadura), correspondiéndose con corredores de la trashumancia que parten de dicha zona septentrional
hasta el sur. En este sentido, dada la ausencia de un desarrollo de carreteras y caminos, y
antes de la implantación del ferrocarril en los siglos XIX y XX, las vías pecuarias fueron un
elemento de comunicación entre áreas geográficas alejadas, y en el desarrollo de la transmisión de estas danzas
Los autores citados apuntan como características comunes a estas danzas las siguientes: los
danzantes son casi siempre hombres, se insertan en un ritual festivo-religioso, adquieren una
dimensión de identificación local muy fuerte- lo que significa que su descontextualización de
dichos marcos rituales las despojará de sus dimensiones de significado- los danzantes forman
parte de gremios o de sectores socieconómicos concretos; y el participar en la danza suele
heredarse intergeneracionalmente. Del mismo modo, apuntan estos autores, la indumentaria
suele responder a ciertos elementos estéticos comunes.
Otra cuestión particularmente ilustrativa del intercambio cultural y de conocimientos, dadas
las muchas similitudes, en cualquiera de las regiones en las que se desarrolla la Trashumancia, es el régimen alimenticio de los pastores trashumantes. Al respecto Fernando Flores del
Manzano afirma que Extremadura ha sido el campo de experimentación culinaria donde los
pastores han intercambiado sus recetas y sus guisos característicos, singularizando la cocina
pastoril con platos típicos como los frites y calderetas de cordero y cabrito, las sopas canas,
las migas, etc., platos que se encuentran extendidos por toda la geografía ganadera.
Tradiciones, costumbres y ritos, tenidos por característicos de ciertas comunidades norteñas,
los hallamos casi idénticos, en tierras extremeñas. Por ejemplo, las celebraciones del ciclo
festivo invernal guardan sorprendentes similitudes, manifiestas en mascaradas y disfraces
de clara impronta pastoril. Debemos, por tanto, recordar la recurrente presencia de pieles,
cornamentas, cencerros y otros elementos de la cultura ganadera tan presentes y comunes
en muchos rituales festivos de la geografía española trashumante.