Consejería De Cultura, Turismo Y Deportes. Bienes De Interés Cultural. (2021040050)
Decreto 40/2021, de 18 de mayo, por el que se declara el Puente del Conde, en los términos municipales de Aldeacentenera y Cabañas del Castillo (Cáceres) como Bien de Interés Cultural, con la categoría de Monumento.
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NÚMERO 98
Martes, 25 de mayo de 2021

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El molino y el canal.
Respecto al molino, es conocido como “de la Puente”, según Plaza Rodríguez. Aunque carece
de cubierta, la mayor parte de sus muros, de mampostería de pizarra —de piedra en seco en
algunas zonas— y tapial, se conservan en buen estado. En la parte trasera del edificio son
visibles otras dependencias de uso agroganadero, así como el pequeño embalse propio de
esta clase de construcciones. También conserva algunas de sus muelas. Además, se hallan
en el molino algunos restos de elementos metálicos, relacionados con el funcionamiento de
este, que denotan su uso hasta mediados del siglo XX. Y es que el molino, como es habitual
en este tipo de infraestructuras, estuvo en funcionamiento hasta finales de los años cincuenta
del siglo XX, momento en el que la introducción de las electroharineras y la mecanización
agraria dieron al traste con estos ingenios, casi los únicos relacionados con la transformación
de materias primas en la Extremadura rural hasta que la aprobación del Plan de Estabilidad
en 1959 abrió la economía agraria al mercado exterior, con todo lo que ello implicó para la
desaparición de muchos aprovechamientos agroganaderos tradicionales e ingenios de transformación de granos. La consecuencia del proceso fue el éxodo rural y la progresiva banalización del territorio.
La molienda de grano no sólo se conecta con el control y aprovechamiento del agua en un
marco de escasez de la misma, como el mediterráneo, sino también con la cultura del trabajo
de los grupos domésticos de los molineros, en el contexto del estraperlo y de las economías
poco monetarizadas que estuvieron vigentes en la región hasta los años sesenta del pasado
siglo, momento en el que la producción estaba muy relacionada con el autoconsumo y escasamente con el comercio, con excepción de ventas locales de productos de huerta y ganado
porcino.
El inmueble se adapta perfectamente a un área con pendiente importante. Se trata de una
construcción compleja, lo cual no contradice sus parámetros tradicionales, en lo que se refiere
a la utilización de materiales y técnicas tradicionales (mampostería, pizarra).
La planta de la construcción es rectangular. En la zona que mira directamente al río se hallan
los dos accesos del agua a los dispositivos de molienda (cárcavos), y también las salidas de
agua. Además, se emplazan en ambos muros laterales los accesos al inmueble, el cual no sólo
condiciona las dependencias del molino, sino también las vivideras, como puede comprobarse
en los interiores con la presencia de distintos tabiques que separan las estancias. El edificio
posee dos accesos laterales. Uno de los dos muros de entrada conforma una estructura a dos
aguas con dos entradas o accesos. Desde aquí, interiormente, se observa un eje a modo de
tabique que separa los interiores longitudinalmente en dos; probablemente una zona vividera
y otra donde estaba la molienda. A su vez, la parte izquierda se subdivide en más dependencias. El otro muro lateral dispone de otra entrada que aproximadamente hace esquina, permi-