Otras Resoluciones. Consejería Para La Transición Ecológica Y Sostenibilidad. Parque Nacional De Monfragüe.- (2021060887)
Resolución de 18 de marzo de 2021, de la Consejera, por la que se aprueba el Plan de acción selectiva de ungulados en el Parque Nacional de Monfragüe.
57 páginas totales
Página
Zahoribo únicamente muestra información pública que han sido publicada previamente por organismos oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
NÚMERO 62
Lunes, 5 de abril de 2021
16800
individuos, siendo estos mixtos, aunque se pueden localizar grupos bastante más grandes, de
hasta 30 individuos. El resto del año existe segregación de sexos, permaneciendo las hembras
agrupadas con sus crías, mientras que los machos suelen ser solitarios o conformando grupos
pequeños.
2.2. CAPACIDAD DE CARGA.
Se entiende como “capacidad de carga el número máximo de animales que pueden pastar
de forma permanente un territorio”. La palabra “pastar” hace referencia a herbívoros. Nada
impide extender el concepto a carnívoros u omnívoros (sustituyendo “pastar” por “vivir”) pero
la gestión de ungulados en nuestro ámbito suele justificar la estimación, por su abundancia,
a herbívoros. La palabra “permanente” es esencial, pues asegura la “sostenibilidad”, esto es,
la pervivencia de las poblaciones y la no degradación del medio.
Si se habla de capacidad de carga ganadera, la base de la estimación se hará sobre especies
de ganado; en el caso de la capacidad de carga de ungulados silvestres, tal base serán especies de ungulados silvestres y la unidad territorial será un terreno definido, pero el concepto
subyacente es el mismo. Si en un terreno determinado conviven (o se pretende que convivan) especies ganaderas y ungulados silvestres, la capacidad de carga, llámese ganadera o
de ungulados silvestres, debe englobar a ambos tipos de especies, pues debe admitirse como
norma general que ambos pueden incidir sobre los mismos pastaderos. Cabe destacar que el
aprovechamiento ganadero dentro de los límites del Parque Nacional es prácticamente nulo.
Son hechos comprobados que las comunidades vegetales interaccionan con los herbívoros
y que las especies vegetales pueden adaptarse al pastoreo. Se admite que a cierto nivel de
pastoreo incluso mejora la composición de las especies vegetales pascícolas, fundamentalmente herbáceas, a través de cierta nitrificación del medio (excrementos) y de estrategias
adaptativas como: producción de semillas, rebrote continuado (mayor calidad nutritiva de los
pastos), resiembras naturales. Tal adaptación tiene un límite, un pastoreo excesivo induce fenómenos como la compactación del suelo, supernitrifación, dominio de especies vegetales nitrófilas de bajo valor pascícola, ausencia de regeneración de la vegetación leñosa (induciendo
un envejecimiento progresivo llamado “fosilización” del monte), o la necesidad de acudir a la
alimentación suplementaria del ganado, doméstico y silvestre. En todo caso, el sobrepastoreo
implica un progresivo debilitamiento de los animales que lleva al descenso de la fertilidad de
las poblaciones y un aumento de la incidencia de enfermedades animales (con el riesgo de
que se produzcan brotes epizoóticos y/o zoonóticos, como la tuberculosis o la sarna).
Los hechos anteriores aconsejan evitar siempre el sobrepastoreo, especialmente en zonas de
alto valor ecológico como las del Parque Nacional de Monfragüe. Hay que tener en cuenta que
si por sobrepastoreo se degrada la vegetación (sobre todo la leñosa), de un espacio natural,
los plazos para su recuperación pueden ser muy amplios.
Lunes, 5 de abril de 2021
16800
individuos, siendo estos mixtos, aunque se pueden localizar grupos bastante más grandes, de
hasta 30 individuos. El resto del año existe segregación de sexos, permaneciendo las hembras
agrupadas con sus crías, mientras que los machos suelen ser solitarios o conformando grupos
pequeños.
2.2. CAPACIDAD DE CARGA.
Se entiende como “capacidad de carga el número máximo de animales que pueden pastar
de forma permanente un territorio”. La palabra “pastar” hace referencia a herbívoros. Nada
impide extender el concepto a carnívoros u omnívoros (sustituyendo “pastar” por “vivir”) pero
la gestión de ungulados en nuestro ámbito suele justificar la estimación, por su abundancia,
a herbívoros. La palabra “permanente” es esencial, pues asegura la “sostenibilidad”, esto es,
la pervivencia de las poblaciones y la no degradación del medio.
Si se habla de capacidad de carga ganadera, la base de la estimación se hará sobre especies
de ganado; en el caso de la capacidad de carga de ungulados silvestres, tal base serán especies de ungulados silvestres y la unidad territorial será un terreno definido, pero el concepto
subyacente es el mismo. Si en un terreno determinado conviven (o se pretende que convivan) especies ganaderas y ungulados silvestres, la capacidad de carga, llámese ganadera o
de ungulados silvestres, debe englobar a ambos tipos de especies, pues debe admitirse como
norma general que ambos pueden incidir sobre los mismos pastaderos. Cabe destacar que el
aprovechamiento ganadero dentro de los límites del Parque Nacional es prácticamente nulo.
Son hechos comprobados que las comunidades vegetales interaccionan con los herbívoros
y que las especies vegetales pueden adaptarse al pastoreo. Se admite que a cierto nivel de
pastoreo incluso mejora la composición de las especies vegetales pascícolas, fundamentalmente herbáceas, a través de cierta nitrificación del medio (excrementos) y de estrategias
adaptativas como: producción de semillas, rebrote continuado (mayor calidad nutritiva de los
pastos), resiembras naturales. Tal adaptación tiene un límite, un pastoreo excesivo induce fenómenos como la compactación del suelo, supernitrifación, dominio de especies vegetales nitrófilas de bajo valor pascícola, ausencia de regeneración de la vegetación leñosa (induciendo
un envejecimiento progresivo llamado “fosilización” del monte), o la necesidad de acudir a la
alimentación suplementaria del ganado, doméstico y silvestre. En todo caso, el sobrepastoreo
implica un progresivo debilitamiento de los animales que lleva al descenso de la fertilidad de
las poblaciones y un aumento de la incidencia de enfermedades animales (con el riesgo de
que se produzcan brotes epizoóticos y/o zoonóticos, como la tuberculosis o la sarna).
Los hechos anteriores aconsejan evitar siempre el sobrepastoreo, especialmente en zonas de
alto valor ecológico como las del Parque Nacional de Monfragüe. Hay que tener en cuenta que
si por sobrepastoreo se degrada la vegetación (sobre todo la leñosa), de un espacio natural,
los plazos para su recuperación pueden ser muy amplios.