Comunidad Autónoma Del Principado de Asturias. III. Otras disposiciones. Bienes de interés cultural. (BOE-A-2025-12397)
Resolución de 14 de mayo de 2025, de la Consejería de Cultura, Política Llingüística y Deporte, por la que se incoa expediente para la declaración de la Trashumancia en Asturias, como bien de interés cultural de carácter inmaterial.
59 páginas totales
Página
Zahoribo únicamente muestra información pública que han sido publicada previamente por organismos oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Núm. 146
Miércoles 18 de junio de 2025
Sec. III. Pág. 81222
trashumancia con la sostenibilidad de nuestro sector agrario, nuestra alimentación, y la
vitalidad social y cultural del medio rural asturiano.
La declaración de la trashumancia como una manifestación inmaterial del Patrimonio
Cultural asturiano podría ser un acicate para visibilizar los servicios ambientales de esta
práctica, y su papel vertebrador del territorio rural (Izquierdo Vallina 2013). Para ello,
resulta imprescindible devolver la dignidad a las comunidades rurales asturianas, que en
las últimas décadas han atravesado una situación de crisis social, económica y cultural
(García Martínez 2016; González-Álvarez 2020), diseñando un nuevo horizonte de vida y
de condiciones laborales adaptadas a los nuevos tiempos para las familias involucradas
en la trashumancia del futuro y en las actividades relacionadas.
La trashumancia como bien patrimonial inmaterial de carácter transversal.
La trashumancia en Asturias deberá ser considerada un bien patrimonial transversal,
lo que debe motivar aproximaciones multidisciplinares a esta manifestación inmaterial.
Con esta perspectiva, su estudio y gobernanza responderán de una forma comprensiva
a la complejidad de esta manifestación, reforzando su valorización social y cultural, y
viabilizando su salvaguarda.
La trashumancia constituye un vector destacado en la antropización del paisaje
asturiano a lo largo de los últimos milenios, a partir del desarrollo de las formas de
producción de alimentos durante el Neolítico. Esta observación revela el peso específico
de la trashumancia en la conformación de las relaciones socioambientales que
establecen las comunidades campesinas con su entorno. La trashumancia, como
manifestación patrimonial, constituye un objeto de atención privilegiado para explorar las
diferentes capas que es posible leer en los paisajes rurales asturianos, en los que se
observa una combinación de aspectos físicos, sociales y simbólicos consecuencia de los
procesos de culturización o humanización del espacio (Criado-Boado 1999).
La cultura y la sociedad del territorio rural asturiano deben una parte no desdeñable
de su esencia al desarrollo histórico de la trashumancia. Los movimientos trashumantes
facilitan la transmisión de noticias y conocimientos (Vázquez Varela 2001), refuerzan los
lazos de vecindad, e incluso facilitan las relaciones sociales y matrimoniales entre
comunidades próximas, y no tan próximas (Gómez Gómez 2001; García Martínez 2004).
Los saberes-haceres tradicionales vinculados con esta actividad, junto con su presencia
transversal en la memoria colectiva o el folklore asturiano, convierten a la trashumancia
en uno de los temas más prominentes en la cultura asturiana. La literatura, las artes
plásticas, la música y los bailes, la toponimia, la mitología y las prácticas religiosas o la
tradición oral recogen su relevancia, incorporando temas ligados a la trashumancia en su
contenido (del Llano Roza de Ampudia y de Valle 1922; González-Quevedo 2002;
Suárez López 2003; García Martínez 2008; Suárez López y Fernández García 2014;
Díaz Gragera 2020). Todo ello contribuye a la transmisión de esta manifestación inmaterial.
Los modos trashumantes determinan formas de uso y aprovechamiento del territorio
que contribuyeron a desarrollar normas y prácticas compartidas que cristalizarían en el
derecho consuetudinario asturiano (Cantero 2005; Arias Díaz et al. 2007). Los manejos
pastoriles se regulan localmente a través de normas y prácticas transmitidas oralmente,
fijadas por escrito a partir de época moderna (Rodríguez-Vigil 2021). Estas normas
vecinales contribuyeron al desarrollo de organismos o elementos representativos a
escala vecinal (local, parroquial, municipal) que gobiernan el aprovechamiento de los
terrenos comunales, como las Juntas de Pastos en zonas como la sierra del Cuera.
Entre los aspectos clave, cabe citar la gestión de los aprovechamientos de diferentes
tipos de terrenos (propiedad privada, espacios comunales), medios para velar por la
convivencia entre distintos manejos pastoriles, así como entre la trashumancia y las
actividades agrícolas. Por ello, se observa en este ámbito el papel de la trashumancia en
la cristalización del derecho y el desarrollo de las instituciones asturianas. Lo cual
convierte a esta manifestación inmaterial en un prisma propicio para analizar tensiones y
enfrentamientos entre diferentes actores sociales con intereses contrapuestos, origen de
conflictos diversos propios de los procesos que conforman la historia de Asturias.
cve: BOE-A-2025-12397
Verificable en https://www.boe.es
5.2
Núm. 146
Miércoles 18 de junio de 2025
Sec. III. Pág. 81222
trashumancia con la sostenibilidad de nuestro sector agrario, nuestra alimentación, y la
vitalidad social y cultural del medio rural asturiano.
La declaración de la trashumancia como una manifestación inmaterial del Patrimonio
Cultural asturiano podría ser un acicate para visibilizar los servicios ambientales de esta
práctica, y su papel vertebrador del territorio rural (Izquierdo Vallina 2013). Para ello,
resulta imprescindible devolver la dignidad a las comunidades rurales asturianas, que en
las últimas décadas han atravesado una situación de crisis social, económica y cultural
(García Martínez 2016; González-Álvarez 2020), diseñando un nuevo horizonte de vida y
de condiciones laborales adaptadas a los nuevos tiempos para las familias involucradas
en la trashumancia del futuro y en las actividades relacionadas.
La trashumancia como bien patrimonial inmaterial de carácter transversal.
La trashumancia en Asturias deberá ser considerada un bien patrimonial transversal,
lo que debe motivar aproximaciones multidisciplinares a esta manifestación inmaterial.
Con esta perspectiva, su estudio y gobernanza responderán de una forma comprensiva
a la complejidad de esta manifestación, reforzando su valorización social y cultural, y
viabilizando su salvaguarda.
La trashumancia constituye un vector destacado en la antropización del paisaje
asturiano a lo largo de los últimos milenios, a partir del desarrollo de las formas de
producción de alimentos durante el Neolítico. Esta observación revela el peso específico
de la trashumancia en la conformación de las relaciones socioambientales que
establecen las comunidades campesinas con su entorno. La trashumancia, como
manifestación patrimonial, constituye un objeto de atención privilegiado para explorar las
diferentes capas que es posible leer en los paisajes rurales asturianos, en los que se
observa una combinación de aspectos físicos, sociales y simbólicos consecuencia de los
procesos de culturización o humanización del espacio (Criado-Boado 1999).
La cultura y la sociedad del territorio rural asturiano deben una parte no desdeñable
de su esencia al desarrollo histórico de la trashumancia. Los movimientos trashumantes
facilitan la transmisión de noticias y conocimientos (Vázquez Varela 2001), refuerzan los
lazos de vecindad, e incluso facilitan las relaciones sociales y matrimoniales entre
comunidades próximas, y no tan próximas (Gómez Gómez 2001; García Martínez 2004).
Los saberes-haceres tradicionales vinculados con esta actividad, junto con su presencia
transversal en la memoria colectiva o el folklore asturiano, convierten a la trashumancia
en uno de los temas más prominentes en la cultura asturiana. La literatura, las artes
plásticas, la música y los bailes, la toponimia, la mitología y las prácticas religiosas o la
tradición oral recogen su relevancia, incorporando temas ligados a la trashumancia en su
contenido (del Llano Roza de Ampudia y de Valle 1922; González-Quevedo 2002;
Suárez López 2003; García Martínez 2008; Suárez López y Fernández García 2014;
Díaz Gragera 2020). Todo ello contribuye a la transmisión de esta manifestación inmaterial.
Los modos trashumantes determinan formas de uso y aprovechamiento del territorio
que contribuyeron a desarrollar normas y prácticas compartidas que cristalizarían en el
derecho consuetudinario asturiano (Cantero 2005; Arias Díaz et al. 2007). Los manejos
pastoriles se regulan localmente a través de normas y prácticas transmitidas oralmente,
fijadas por escrito a partir de época moderna (Rodríguez-Vigil 2021). Estas normas
vecinales contribuyeron al desarrollo de organismos o elementos representativos a
escala vecinal (local, parroquial, municipal) que gobiernan el aprovechamiento de los
terrenos comunales, como las Juntas de Pastos en zonas como la sierra del Cuera.
Entre los aspectos clave, cabe citar la gestión de los aprovechamientos de diferentes
tipos de terrenos (propiedad privada, espacios comunales), medios para velar por la
convivencia entre distintos manejos pastoriles, así como entre la trashumancia y las
actividades agrícolas. Por ello, se observa en este ámbito el papel de la trashumancia en
la cristalización del derecho y el desarrollo de las instituciones asturianas. Lo cual
convierte a esta manifestación inmaterial en un prisma propicio para analizar tensiones y
enfrentamientos entre diferentes actores sociales con intereses contrapuestos, origen de
conflictos diversos propios de los procesos que conforman la historia de Asturias.
cve: BOE-A-2025-12397
Verificable en https://www.boe.es
5.2