Comunidad Autónoma de Las Illes Balears. I. Disposiciones generales. Turismo. (BOE-A-2024-26254)
Ley 5/2024, de 11 de noviembre, de control de la afluencia de vehículos en la isla de Eivissa para la sostenibilidad turística.
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BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Martes 17 de diciembre de 2024
Sec. I. Pág. 172871
insular la determinación del grosor de las disposiciones necesarias para conseguir los
objetivos perseguidos, con el establecimiento de un marco conforme a los principios de
necesidad, eficacia, proporcionalidad y no discriminación. Todo esto en consonancia con
las competencias atribuidas a los consejos insulares en el artículo 70 del Estatuto de
Autonomía, como también con las que corresponden a las entidades territoriales de
acuerdo con la legislación básica de régimen local.
III
La respuesta que se quiere dar con la aprobación de esta ley a los graves riesgos
que amenazan Eivissa está en sintonía con las políticas y estrategias de la Unión
Europea vigentes en ámbitos como los transportes y la movilidad, el turismo, el medio
ambiente y la energía. Varios instrumentos estimulan a las administraciones estatales,
regionales y locales a adoptar sus políticas dirigidas a garantizar los principios y
objetivos que proponen las instituciones comunitarias. Así, conviene recordar que el
Tratado de Maastricht (1992) fijó las bases de la política comunitaria de transportes e
incorporó los requisitos de protección del medio ambiente; y que el Tratado de
Ámsterdam (1999) estableció como obligación la integración de la protección
medioambiental en todas las políticas sectoriales de la Unión Europea, con el objetivo de
promover el desarrollo sostenible. Mediante el Tratado de Lisboa (2009), la lucha contra
el cambio climático pasó a ser un objetivo específico de la Unión.
Por un lado, hay que señalar que entre los objetivos concretos de la política de la
Unión Europea en el ámbito del medio ambiente se encuentran la conservación, la
protección y la mejora de la calidad del medio ambiente, como también la protección de
la salud de las personas. Esta política se basa en los principios de cautela, acción de
prevención y corrección de la contaminación en su fuente.
La Comisión Europea, mediante la Comunicación COM (2009) 490 final, de 30 de
septiembre de 2009, Plan de Acción de Movilidad Urbana, constató que determinadas
políticas, como por ejemplo la cohesión, el medio ambiente y la salud, entre otros, no
pueden conseguir sus objetivos sin tener en cuenta especificidades urbanas tales como
la movilidad. El principio de movilidad sostenible trata de garantizar una movilidad
eficiente de mercancías y personas, a la vez que tiene que gestionar el creciente
volumen de transporte y, por lo tanto, minimizar los costes externos derivados de los
accidentes de circulación, las enfermedades respiratorias, el cambio climático, el ruido, la
contaminación ambiental o los atascos. La aplicación de este principio exige un enfoque
integrado para optimizar la eficiencia del sistema y la organización de los transportes, así
como la reducción del consumo de energía y del impacto sobre el medio ambiente. El 14
de diciembre de 2021, la Comisión Europea, mediante la Comunicación COM (2021) 811
final, presentó su nuevo marco de movilidad urbana, el cual presta especial atención a
una movilidad más sana y segura, al transporte público y a los desplazamientos a pie y
en bicicleta, da prioridad a las soluciones con cero emisiones para las flotas de
transporte urbano, como los taxis y otros servicios de transporte con conductor, incluye
consideraciones sobre los servicios de reparto urbano y esboza opciones de financiación
para que los entes locales y regionales apliquen estas medidas. Destaca también la
mayor relevancia que se quiere dar a la figura de los planes de movilidad urbana
sostenibles.
En el Libro blanco del transporte, Hoja de ruta hacia un espacio único europeo de
transporte: por una política de transportes competitiva y sostenible (COM [2011] 144
final), de 28 de marzo de 2011, la Comisión describe el transporte como pieza
fundamental para nuestra economía y nuestra sociedad, y al mismo tiempo establece
que tiene que ser sostenible, a causa de las cada vez mayores limitaciones
medioambientales y de recursos. Entre los puntos clave que identifica su hoja de ruta,
se incluye el objetivo de conseguir la eliminación progresiva del uso de vehículos de
gasolina y diésel. Por su parte, el Dictamen del Comité Económico y Social Europeo
sobre el Documento de trabajo de los servicios de la Comisión –Evaluación del Libro
cve: BOE-A-2024-26254
Verificable en https://www.boe.es
Núm. 303
Martes 17 de diciembre de 2024
Sec. I. Pág. 172871
insular la determinación del grosor de las disposiciones necesarias para conseguir los
objetivos perseguidos, con el establecimiento de un marco conforme a los principios de
necesidad, eficacia, proporcionalidad y no discriminación. Todo esto en consonancia con
las competencias atribuidas a los consejos insulares en el artículo 70 del Estatuto de
Autonomía, como también con las que corresponden a las entidades territoriales de
acuerdo con la legislación básica de régimen local.
III
La respuesta que se quiere dar con la aprobación de esta ley a los graves riesgos
que amenazan Eivissa está en sintonía con las políticas y estrategias de la Unión
Europea vigentes en ámbitos como los transportes y la movilidad, el turismo, el medio
ambiente y la energía. Varios instrumentos estimulan a las administraciones estatales,
regionales y locales a adoptar sus políticas dirigidas a garantizar los principios y
objetivos que proponen las instituciones comunitarias. Así, conviene recordar que el
Tratado de Maastricht (1992) fijó las bases de la política comunitaria de transportes e
incorporó los requisitos de protección del medio ambiente; y que el Tratado de
Ámsterdam (1999) estableció como obligación la integración de la protección
medioambiental en todas las políticas sectoriales de la Unión Europea, con el objetivo de
promover el desarrollo sostenible. Mediante el Tratado de Lisboa (2009), la lucha contra
el cambio climático pasó a ser un objetivo específico de la Unión.
Por un lado, hay que señalar que entre los objetivos concretos de la política de la
Unión Europea en el ámbito del medio ambiente se encuentran la conservación, la
protección y la mejora de la calidad del medio ambiente, como también la protección de
la salud de las personas. Esta política se basa en los principios de cautela, acción de
prevención y corrección de la contaminación en su fuente.
La Comisión Europea, mediante la Comunicación COM (2009) 490 final, de 30 de
septiembre de 2009, Plan de Acción de Movilidad Urbana, constató que determinadas
políticas, como por ejemplo la cohesión, el medio ambiente y la salud, entre otros, no
pueden conseguir sus objetivos sin tener en cuenta especificidades urbanas tales como
la movilidad. El principio de movilidad sostenible trata de garantizar una movilidad
eficiente de mercancías y personas, a la vez que tiene que gestionar el creciente
volumen de transporte y, por lo tanto, minimizar los costes externos derivados de los
accidentes de circulación, las enfermedades respiratorias, el cambio climático, el ruido, la
contaminación ambiental o los atascos. La aplicación de este principio exige un enfoque
integrado para optimizar la eficiencia del sistema y la organización de los transportes, así
como la reducción del consumo de energía y del impacto sobre el medio ambiente. El 14
de diciembre de 2021, la Comisión Europea, mediante la Comunicación COM (2021) 811
final, presentó su nuevo marco de movilidad urbana, el cual presta especial atención a
una movilidad más sana y segura, al transporte público y a los desplazamientos a pie y
en bicicleta, da prioridad a las soluciones con cero emisiones para las flotas de
transporte urbano, como los taxis y otros servicios de transporte con conductor, incluye
consideraciones sobre los servicios de reparto urbano y esboza opciones de financiación
para que los entes locales y regionales apliquen estas medidas. Destaca también la
mayor relevancia que se quiere dar a la figura de los planes de movilidad urbana
sostenibles.
En el Libro blanco del transporte, Hoja de ruta hacia un espacio único europeo de
transporte: por una política de transportes competitiva y sostenible (COM [2011] 144
final), de 28 de marzo de 2011, la Comisión describe el transporte como pieza
fundamental para nuestra economía y nuestra sociedad, y al mismo tiempo establece
que tiene que ser sostenible, a causa de las cada vez mayores limitaciones
medioambientales y de recursos. Entre los puntos clave que identifica su hoja de ruta,
se incluye el objetivo de conseguir la eliminación progresiva del uso de vehículos de
gasolina y diésel. Por su parte, el Dictamen del Comité Económico y Social Europeo
sobre el Documento de trabajo de los servicios de la Comisión –Evaluación del Libro
cve: BOE-A-2024-26254
Verificable en https://www.boe.es
Núm. 303