Ministerio Para La Transición Ecológica y El Reto Demográfico. III. Otras disposiciones. Impacto ambiental. (BOE-A-2024-24505)
Resolución de 14 de noviembre de 2024, de la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental, por la que se formula declaración de impacto ambiental del proyecto «Conjunto de proyectos para la creación de humedales seminaturales en la franja perimetral del Mar Menor».
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BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Sábado 23 de noviembre de 2024
Sec. III. Pág. 158146
de fauna, un estudio de residuos y un informe de la situación preoperacional. Por otro
lado, durante la fase de obras, se emitirán informes de control, informes de seguimiento
ambiental, informes puntuales, informes de no conformidades, actas de reuniones y un
informe final. El promotor contempla la elaboración de un protocolo de definición de
nuevas medidas correctoras en el caso de que se presenten circunstancias no previstas
en el proyecto.
En relación con los seguimientos durante la fase de obras, se incluyen los siguientes
controles: emisiones de polvo, partículas y contaminantes (periodicidad mensual y
semanales en periodos secos); niveles acústicos (mensual); jalonamiento (semanal y
antes y después de la obra); retirada y acopio de tierra vegetal (antes de las obras en
zonas con tierra vegetal); calidad del agua (dos análisis a lo largo de la ejecución de las
obras); gestión de residuos (mensual); protección de la vegetación (una inspección
previa a las obras y las siguientes mensuales); protección de la fauna, especialmente de
la avifauna (semanalmente); medio social, económico y cultural (la periodicidad de las
inspecciones dependerá de la cantidad de servicios afectados).
Durante la fase de explotación, se incluyen los siguientes seguimientos: niveles
piezométricos (tres campañas anuales); control cualitativo de las aguas (mensual o
trimestral dependiendo del parámetro que se mida); control cuantitativo de las aguas;
sedimentos (en cada episodio de lluvias y anual durante los 3 primeros años tras las
obras); vegetación (anual); fauna (anual); salud humana para evitar el desarrollo de
enfermedades o de plagas (bianual, seleccionando los momentos de mayor riesgo de
desarrollo de enfermedades o plagas); y, control de los usos del suelo (anual). Asimismo,
el promotor indica que se realizarán controles diarios durante las obras de: vertido de
residuos y su correcta gestión; utilización de la vía de acceso a la zona de actuación;
posible afección a la fauna; y, no afección a los viales de tránsito por el paso de la
maquinaria.
En relación con el riesgo sobre la salud debido a la posible proliferación de
mosquitos durante el funcionamiento de los humedales, el promotor propone realizar
inspecciones semanales durante los meses más cálidos y mensuales durante los más
fríos de las áreas potenciales de cría en los humedales proyectados para identificar
posibles focos. Una vez identificados dichos focos, se aplicarán larvicidas y otros
tratamientos para eliminar los mosquitos adultos. Las labores serán comunicadas a los
centros de control de mosquitos existentes para que los nuevos humedales pasen a
formar parte de la red de seguimiento de estos centros.
El control cuantitativo del agua se realizará con una periodicidad diferente según el
tipo de inspección durante los 3 primeros años después de las obras. Así, en el caso del
seguimiento del caudal de salida, se realizarán inspecciones a lo largo del año. El
promotor indica que se realizarán inspecciones visuales del cauce para comprobar el
grado de turbidez de las aguas y la ausencia de aceites o lubricantes y de maquinaria
innecesaria en el cauce. También, se realizarán seguimientos de los calados alcanzados
en el humedal en cada episodio de lluvias y cuatro campañas anuales (una en cada
estación). La tasa de evaporación-evapotranspiración se controlará en cuatro campañas
anuales (una en cada estación) y, finalmente, la tasa de infiltración se controlará en cada
episodio de lluvias y durante cuatro campañas anuales (una en cada estación).
El promotor plantea elaborar un plan de mantenimiento aplicado durante los dos
años posteriores a las obras. Una vez terminado dicho plazo, al ser terrenos adscritos a
la Administración General del Estado, será ésta la que se haga cargo de su
mantenimiento según el artículo 16 de la Ley de Suelo y Rehabilitación Urbana. Entre
otros aspectos, el plan de mantenimiento incluye: dos riegos de mantenimiento al año, la
reposición de marras (12 % de las plantas) y la retirada de carrizo, sedimento y tubos
protectores. En ambos humedales, se estima que durante los dos primeros años de
mantenimiento se acumulen anualmente un total de 0,5 m de espesor de sedimentos en
un 30 % de la superficie del vaso. En relación con el carrizo, se prevé su retirada
periódica, fundamentalmente en septiembre, con el objetivo de retirar de la circulación
los nutrientes en él retenidos. Se estima una densidad de retirada de carrizo de 15 t/ha y
cve: BOE-A-2024-24505
Verificable en https://www.boe.es
Núm. 283
Sábado 23 de noviembre de 2024
Sec. III. Pág. 158146
de fauna, un estudio de residuos y un informe de la situación preoperacional. Por otro
lado, durante la fase de obras, se emitirán informes de control, informes de seguimiento
ambiental, informes puntuales, informes de no conformidades, actas de reuniones y un
informe final. El promotor contempla la elaboración de un protocolo de definición de
nuevas medidas correctoras en el caso de que se presenten circunstancias no previstas
en el proyecto.
En relación con los seguimientos durante la fase de obras, se incluyen los siguientes
controles: emisiones de polvo, partículas y contaminantes (periodicidad mensual y
semanales en periodos secos); niveles acústicos (mensual); jalonamiento (semanal y
antes y después de la obra); retirada y acopio de tierra vegetal (antes de las obras en
zonas con tierra vegetal); calidad del agua (dos análisis a lo largo de la ejecución de las
obras); gestión de residuos (mensual); protección de la vegetación (una inspección
previa a las obras y las siguientes mensuales); protección de la fauna, especialmente de
la avifauna (semanalmente); medio social, económico y cultural (la periodicidad de las
inspecciones dependerá de la cantidad de servicios afectados).
Durante la fase de explotación, se incluyen los siguientes seguimientos: niveles
piezométricos (tres campañas anuales); control cualitativo de las aguas (mensual o
trimestral dependiendo del parámetro que se mida); control cuantitativo de las aguas;
sedimentos (en cada episodio de lluvias y anual durante los 3 primeros años tras las
obras); vegetación (anual); fauna (anual); salud humana para evitar el desarrollo de
enfermedades o de plagas (bianual, seleccionando los momentos de mayor riesgo de
desarrollo de enfermedades o plagas); y, control de los usos del suelo (anual). Asimismo,
el promotor indica que se realizarán controles diarios durante las obras de: vertido de
residuos y su correcta gestión; utilización de la vía de acceso a la zona de actuación;
posible afección a la fauna; y, no afección a los viales de tránsito por el paso de la
maquinaria.
En relación con el riesgo sobre la salud debido a la posible proliferación de
mosquitos durante el funcionamiento de los humedales, el promotor propone realizar
inspecciones semanales durante los meses más cálidos y mensuales durante los más
fríos de las áreas potenciales de cría en los humedales proyectados para identificar
posibles focos. Una vez identificados dichos focos, se aplicarán larvicidas y otros
tratamientos para eliminar los mosquitos adultos. Las labores serán comunicadas a los
centros de control de mosquitos existentes para que los nuevos humedales pasen a
formar parte de la red de seguimiento de estos centros.
El control cuantitativo del agua se realizará con una periodicidad diferente según el
tipo de inspección durante los 3 primeros años después de las obras. Así, en el caso del
seguimiento del caudal de salida, se realizarán inspecciones a lo largo del año. El
promotor indica que se realizarán inspecciones visuales del cauce para comprobar el
grado de turbidez de las aguas y la ausencia de aceites o lubricantes y de maquinaria
innecesaria en el cauce. También, se realizarán seguimientos de los calados alcanzados
en el humedal en cada episodio de lluvias y cuatro campañas anuales (una en cada
estación). La tasa de evaporación-evapotranspiración se controlará en cuatro campañas
anuales (una en cada estación) y, finalmente, la tasa de infiltración se controlará en cada
episodio de lluvias y durante cuatro campañas anuales (una en cada estación).
El promotor plantea elaborar un plan de mantenimiento aplicado durante los dos
años posteriores a las obras. Una vez terminado dicho plazo, al ser terrenos adscritos a
la Administración General del Estado, será ésta la que se haga cargo de su
mantenimiento según el artículo 16 de la Ley de Suelo y Rehabilitación Urbana. Entre
otros aspectos, el plan de mantenimiento incluye: dos riegos de mantenimiento al año, la
reposición de marras (12 % de las plantas) y la retirada de carrizo, sedimento y tubos
protectores. En ambos humedales, se estima que durante los dos primeros años de
mantenimiento se acumulen anualmente un total de 0,5 m de espesor de sedimentos en
un 30 % de la superficie del vaso. En relación con el carrizo, se prevé su retirada
periódica, fundamentalmente en septiembre, con el objetivo de retirar de la circulación
los nutrientes en él retenidos. Se estima una densidad de retirada de carrizo de 15 t/ha y
cve: BOE-A-2024-24505
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Núm. 283