BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Lunes 28 de octubre de 2024

Sec. III. Pág. 138050

ANEXO
Descripción del bien y justificación de los valores que lo hacen merecedor de su
declaración como bien de interés cultural
Introducción histórica
La construcción del palacio de Buenavista se inició a finales del siglo XVIII para servir
de residencia a doña María del Pilar Teresa de Silva, Duquesa de Alba. Las obras se
iniciaron siguiendo las directrices del proyecto realizado por Juan Pedro Arnal quien, al
parecer, se inspiró en otro proyecto anterior de Ventura Rodríguez del que aún se
conserva la maqueta. Este nuevo edificio proyectado por Arnal, de estética sobria y
rigurosa propia del estilo neoclásico, cambiaba la orientación del proyecto original,
ubicando así la fachada principal a la calle de Emperatriz, sobre terreno de las actuales
calles de Sauco y Almirante. Este planteamiento se puso en marcha, y a juzgar por el
proyecto conservado, el Palacio llegó a tener un ostentoso ingreso, con verjas de hierro,
una noble escalera de honor, un oratorio y otras estancias. todo ello bajo un tratamiento
de gran empaque constructivo. Esta obra se levantaba en torno a 1782, y parte del
proyecto comprendía un hermoso jardín, que en declive rodeaba la vivienda por los lados
este, sur y oeste, que se complementaba con varias fuentes.
La duquesa de Alba murió a principios del siglo XIX y no llegó a residir en Buenavista
pues dos grandes incendios destruyeron lo construido siendo, posteriormente,
transformado el proyecto primitivo. El proyecto de Arnal comprendía dos patios
rectangulares como espacios reguladores de toda la trama. Tras los incendios se cambió
la orientación del monumento, trasladando la escalera principal y entrada, al lienzo
opuesto, frontero a la calle de Alcalá.
Fallecida la duquesa de Alba, el palacio fue adquirido por la Corporación Municipal
para ofrecérselo a Godoy. El favorito de Carlos IV tampoco pudo habitarlo pues a raíz del
motín de Aranjuez le fueron secuestrados sus bienes. Durante el reinado de José
Bonaparte se construyó donde había un terraplén, la gran escalera hacia la calle de
Alcalá, cobrando mayor importancia la fachada, para transformarlo en Museo de
Pinturas. En 1847 fue destinado a Ministerio de la Guerra, reformándose según proyecto
de José María Aparici. Para aumentar la extensión de la propiedad, se agrandó
incorporándole los terrenos de la huerta del corregidor Juan Fernández, derribándose los
muros que cerraban el solar y procediéndose a la forja de una verja que aún marca los
límites de su amplio jardín.
En 1870 se incorporó una nueva crujía formándose un segundo patio. Se construyó
siguiendo el estilo y las proporciones de lo ya edificado de manera que no se modificara
la unidad estilística del conjunto.
Autor
Juan Pedro Arnal, arquitecto de origen francés, estudió arquitectura en la Academia
de Bellas Artes de Toulouse, para luego continuar su formación en la Real Academia de
Bellas Artes de San Fernando de Madrid. En esta institución llegó a ser académico de
mérito y profesor desde 1772 y posteriormente teniente-director en 1773; llegando a
sustituir a Ventura Rodríguez en el cargo de Director de Arquitectura desde 1785 y
culminando como arquitecto del Rey y director general de la Academia en 1801. En
España trabajó con Villanueva y Hermosilla. Desde 1766 hasta su muerte en 1905,
impartió clases de Geometría en la Academia de Madrid. Desde su cátedra desempeñó
un singular papel como difusor de las opiniones y gustos franceses e italianos.
Descripción del bien objeto de la incoación
El palacio de Buenavista, hoy sede del Cuartel General del Ejército de Tierra, ocupa
una amplia manzana entre la plaza de La Cibeles, la calle de Alcalá, paseo de Recoletos

cve: BOE-A-2024-22190
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Núm. 260