III. Otras disposiciones. ADMINISTRACIÓN LOCAL. Bienes de interés cultural. (BOE-A-2024-15572)
Resolución de 17 de julio de 2024, del Consejo Insular de Mallorca (Illes Balears), referente a la declaración como bien de interés cultural, con categoría de monumento, de las casas de Sa Granja de Esporles, y con categoría de jardín histórico el conjunto de sus jardines y huertos en bancales, en el término municipal de Esporles.
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BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Sábado 27 de julio de 2024
Sec. III. Pág. 96683
2. Evolución de la posesión durante la época de los Vida y los Fortuny (1474siglo XX).
En términos generales, el siglo XV representa, para Sa Granja, un periodo de
decadencia. No es hasta el último tercio de la centuria cuando se ponen las bases para
la recuperación y regeneración de la posesión.
La documentación de mediados del siglo XV indica que en aquel momento la
posesión cuenta con dos edificaciones diferentes citadas como «casas de arriba» y
«casas de abajo», a causa de la morfología del terreno. Las casas de arriba,
probablemente situadas en una zona próxima al torrente, cuentan con una sala, varias
cámaras y una capilla en el primer piso, además de unas tiendas en la planta baja.
Dentro de esta porción también hay las casas de las mujeres, destinadas a las
recolectoras de aceituna, seguramente separadas e independientes del edificio principal.
No hay descripción de la época de las casas de abajo, pero sí se sabe que eran de
menores dimensiones. También había un conjunto de dependencias agropecuarias
probablemente dispersas en torno a las edificaciones: la tienda de aceite, el porche, el
corral, la paliza, el establo, la casa del pastor, la casa del molinero y una almazara con
dos vigas.
A finales del siglo XVI ya se describe la existencia de cinco molinos, un número
considerable de dependencias y una capilla.
La evolución de las casas tiene un punto de inflexión entre 1680 y 1730, periodo en
que se llevan a cabo numerosas mejoras, no sólo en las casas, sino también en los
terrenos que lo rodean. En aquel momento, la casa ya está dispuesta en torno al patio
empedrado (clastra), con fachada a las cuatro orientaciones.
En la época de la familia Fortuny –segunda mitad del siglo XVIII y principios del
siguiente–, es cuando se llevan a cabo las reformas más importantes de la propiedad,
que le confieren el aspecto señorial característico que conserva hoy en día. Se crea una
sala para biblioteca y, muy probablemente, el jardín de arriba.
Entre 1736 y 1792, Ramon Fortuny y Gual unifica todos los espacios en torno al
claustro central, construye la lonja barroca y formaliza la fachada monumental, encarada
al norte. Además, lleva a cabo una serie de reformas con un contenido escenográfico
importante, que afectan también los espacios exteriores, siendo probablemente el
ejemplo más destacado el obrador del antiguo molino de las casas, transformado en una
gruta integrada en el jardín de arriba.
Finalmente, entre 1803 y 1840, en época de Ramon Fortuny i Puigdorfila se
incorporan nuevas estancias y se finaliza y configura definitivamente el edificio, dando
lugar al volumen que llega hasta finales del siglo XX.
A mitad del siglo XIX también se modificó el diseño de los jardines para adaptarlos a
los espectáculos lúdicos, de acuerdo con el gusto de la época: el jardín alto adquirió el
trazado sinuoso y orgánico que ha pervivido hasta la actualidad; y los jardines de abajo
incorporaron juegos de agua bajo el emparrado. El paseo de plataneros probablemente
también data de esta época.
A partir de la década de 1970 las casas, los elementos rurales y etnológicos, y una
parte del territorio se adaptan para la explotación turística, con la voluntad de reunir una
colección de utensilios propios del campesinado mallorquín. Este último uso, por una
parte favoreció la conservación del conjunto, pero de la otra introduce aspectos ajenos a
su historia que le confieren un aspecto de ruralidad impostada ajeno a la pretendida
autenticidad.
4.
Memoria descriptiva
Sa Granja de Esporles forma un conjunto monumental constituido por las casas y los
espacios exteriores que lo rodean; los más próximos a las casas, convertidos en
jardines, originalmente formaban los huertos, y los más alejados destinados al cultivo.
El conjunto se estructura a partir del torrente, que determina dos bordes. A la
derecha, orientadas al norte, se sitúan las casas, señorial y rústica, en un bancal
cve: BOE-A-2024-15572
Verificable en https://www.boe.es
Núm. 181
Sábado 27 de julio de 2024
Sec. III. Pág. 96683
2. Evolución de la posesión durante la época de los Vida y los Fortuny (1474siglo XX).
En términos generales, el siglo XV representa, para Sa Granja, un periodo de
decadencia. No es hasta el último tercio de la centuria cuando se ponen las bases para
la recuperación y regeneración de la posesión.
La documentación de mediados del siglo XV indica que en aquel momento la
posesión cuenta con dos edificaciones diferentes citadas como «casas de arriba» y
«casas de abajo», a causa de la morfología del terreno. Las casas de arriba,
probablemente situadas en una zona próxima al torrente, cuentan con una sala, varias
cámaras y una capilla en el primer piso, además de unas tiendas en la planta baja.
Dentro de esta porción también hay las casas de las mujeres, destinadas a las
recolectoras de aceituna, seguramente separadas e independientes del edificio principal.
No hay descripción de la época de las casas de abajo, pero sí se sabe que eran de
menores dimensiones. También había un conjunto de dependencias agropecuarias
probablemente dispersas en torno a las edificaciones: la tienda de aceite, el porche, el
corral, la paliza, el establo, la casa del pastor, la casa del molinero y una almazara con
dos vigas.
A finales del siglo XVI ya se describe la existencia de cinco molinos, un número
considerable de dependencias y una capilla.
La evolución de las casas tiene un punto de inflexión entre 1680 y 1730, periodo en
que se llevan a cabo numerosas mejoras, no sólo en las casas, sino también en los
terrenos que lo rodean. En aquel momento, la casa ya está dispuesta en torno al patio
empedrado (clastra), con fachada a las cuatro orientaciones.
En la época de la familia Fortuny –segunda mitad del siglo XVIII y principios del
siguiente–, es cuando se llevan a cabo las reformas más importantes de la propiedad,
que le confieren el aspecto señorial característico que conserva hoy en día. Se crea una
sala para biblioteca y, muy probablemente, el jardín de arriba.
Entre 1736 y 1792, Ramon Fortuny y Gual unifica todos los espacios en torno al
claustro central, construye la lonja barroca y formaliza la fachada monumental, encarada
al norte. Además, lleva a cabo una serie de reformas con un contenido escenográfico
importante, que afectan también los espacios exteriores, siendo probablemente el
ejemplo más destacado el obrador del antiguo molino de las casas, transformado en una
gruta integrada en el jardín de arriba.
Finalmente, entre 1803 y 1840, en época de Ramon Fortuny i Puigdorfila se
incorporan nuevas estancias y se finaliza y configura definitivamente el edificio, dando
lugar al volumen que llega hasta finales del siglo XX.
A mitad del siglo XIX también se modificó el diseño de los jardines para adaptarlos a
los espectáculos lúdicos, de acuerdo con el gusto de la época: el jardín alto adquirió el
trazado sinuoso y orgánico que ha pervivido hasta la actualidad; y los jardines de abajo
incorporaron juegos de agua bajo el emparrado. El paseo de plataneros probablemente
también data de esta época.
A partir de la década de 1970 las casas, los elementos rurales y etnológicos, y una
parte del territorio se adaptan para la explotación turística, con la voluntad de reunir una
colección de utensilios propios del campesinado mallorquín. Este último uso, por una
parte favoreció la conservación del conjunto, pero de la otra introduce aspectos ajenos a
su historia que le confieren un aspecto de ruralidad impostada ajeno a la pretendida
autenticidad.
4.
Memoria descriptiva
Sa Granja de Esporles forma un conjunto monumental constituido por las casas y los
espacios exteriores que lo rodean; los más próximos a las casas, convertidos en
jardines, originalmente formaban los huertos, y los más alejados destinados al cultivo.
El conjunto se estructura a partir del torrente, que determina dos bordes. A la
derecha, orientadas al norte, se sitúan las casas, señorial y rústica, en un bancal
cve: BOE-A-2024-15572
Verificable en https://www.boe.es
Núm. 181