III. Otras disposiciones. MINISTERIO PARA LA TRANSICIÓN ECOLÓGICA Y EL RETO DEMOGRÁFICO. Impacto ambiental. (BOE-A-2023-26159)
Resolución de 14 de diciembre de 2023, de la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental, por la que se formula informe ambiental estratégico conjunto de la revisión de los Planes Especiales de Sequía de las Demarcaciones Hidrográficas Intercomunitarias, Ceuta y Melilla.
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BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Sábado 23 de diciembre de 2023

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Los planes plantean una gran cantidad de medidas para hacer frente a las
situaciones de escasez. De entre los diferentes tipos de medidas adoptadas en los
diferentes escenarios de escasez, pueden provocar efectos ambientales positivos las
medidas consistentes en reducir los usos del agua que se adoptan en los escenarios de
alerta y emergencia. En cambio, las medidas previstas para aumentar la disponibilidad
del recurso en estos escenarios, tales como la aportación de recursos externos,
incremento de uso de aguas subterráneas, incremento de reutilización de aguas
depuradas o intercambios de derechos, pueden provocar impactos ambientales
negativos en las masas de agua cedentes y en los ecosistemas y biodiversidad
asociados. En el caso de incremento en las extracciones de aguas subterráneas o de la
puesta en funcionamiento de pozos de sequía, se puede producir un deterioro en el
estado cuantitativo de la masa de agua subterránea afectada que es consecuencia
directa de la selección y adopción de estas medidas, más que de la propia sequía. El
establecimiento de reservas estratégicas en embalses también puede generar impactos
negativos si ello se consigue en base a haber reducido previamente el régimen de
caudales ecológicos mínimos en sequía prolongada. En este sentido, el PES del
Guadalquivir indica que la reducción de los caudales ecológicos mínimos en época de
sequía prolongada permite disponer de 24 hm3 más de recurso. Las medidas
consideradas de finalidad ambiental deben incluir aumentos no cuantificados en los
sistemas de vigilancia y control y seguimiento de la evolución de los indicadores
medioambientales afectados, apreciándose ausencia de medidas que de una forma más
proactiva permitan reducir el impacto ambiental asociado a la escasez. Las medidas
previstas para el seguimiento ambiental resultan escasas, y carecen de un seguimiento
apropiado de los efectos tanto de las sequías como de las medidas adoptadas en
ejecución de los planes sobre algunos aspectos ambientales clave, tales como sobre los
objetivos de conservación de espacios Red Natura 2000 o sobre las poblaciones de
especies protegidas o de interés pesquero.
Finalmente, las medidas previstas para la recuperación, finalizada la situación crítica,
son la aportación de los caudales necesarios para la recuperación de los ecosistemas y
la compensación de las reservas estratégicas utilizadas incluidos los acuíferos, si bien se
formulan de forma indeterminada. Ambas medidas son de tipo hidráulico, y no se
cuantifican en términos de volumen, caudal o tiempo de recuperación, y por sí solas
pueden resultar insuficientes para recuperar ciertos impactos ambientales provocados
por las medidas adoptadas frente a la sequía o la escasez. Por ejemplo, cuando la
reducción de caudales circulantes y el empeoramiento de la calidad del agua provoca
una reducción importante de la población de una especie amenazada o un deterioro
importante de determinado hábitat de interés comunitario, o la extinción local de una
especie en un tramo aislado de otros por presas o azudes que impiden su posterior
recolonización natural, o cuando la situación creada durante el periodo de estrés
favorece de manera diferencial a especies exóticas invasoras frente a especies
autóctonas. En estos casos, cuando finaliza la emergencia, no se puede considerar
seguro que los impactos provocados se reviertan y recuperen mediante una aportación
de un caudal adicional pero indeterminado por un tiempo también inconcreto. Los
documentos ambientales de los PES no incluyen medidas apropiadas y concretas para
recuperar y revertir este tipo de impactos graves, que no se han considerado. Como
ejemplo extraído del archivo documental de SABIA se puede citar la extinción a escala
local en el manantial del Gorgotón y su entorno en el río Segura de la náyade Potomida
littoralis y del hábitat de interés comunitario 3140 «Aguas oligomesotróficas calcáreas
con vegetación béntica de Chara spp.» tras periodos de desecación del manantial
asociados a la activación de pozos de sequía, extinciones que no se han revertido a
pesar de la posterior recuperación del flujo experimentada por este manantial.
Este riesgo de deterioro persistente es puesto de manifiesto por la Dirección General
de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático del Gobierno de Cantabria, que
requiere prestar especial atención a lo que suceda en espacios naturales protegidos.

cve: BOE-A-2023-26159
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Núm. 306