III. Otras disposiciones. ADMINISTRACIÓN LOCAL. Bienes de interés cultural. (BOE-A-2023-13214)
Resolución de 15 de mayo de 2023, del Consejo Insular de Mallorca (Illes Balears), referente a la incoación del expediente de declaración como bien de interés cultural, con categoría de conjunto histórico, de los elementos que conforman el conjunto de la central y la colonia industrial, y de declaración como bien de interés cultural, con categoría de monumento, del edificio central térmica de Alcanada, en el término municipal de Alcúdia.
42 páginas totales
Página
Zahoribo únicamente muestra información pública que han sido publicada previamente por organismos oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Núm. 131

Viernes 2 de junio de 2023

Sec. III. Pág. 78764

noviembre de 1964. Con estas obras se consideró que la Central quedaba finalizada tal
cómo se había proyectado, aunque el grupo III pasó de 15.000 KW en el proyecto inicial,
a tener finalmente 37.500 kW. La finalización de la central fue muy importante para la
empresa, ya que permitió utilizar con todo el rendimiento todas las instalaciones
auxiliares (toma de agua de refrigeración, parque de combustible, nave de encubado,
almacenes, talleres, poblado, etc.) y los servicios generales, que fueron proyectados con
su total potencia, por lo que se podía empezar a rentabilizar la inversión. La central
estuvo en producción hasta que se dio de baja entre 1982 y 1984.
El Poblado de GESA.

Desde un primer momento, con la construcción de la central térmica, GESA se
planteó la construcción de una colonia industrial, siguiendo el modelo de otros centros
industriales que, con la segunda etapa de desarrollo industrial, abandonaban los núcleos
urbanos, al tiempo que levantaban conjuntos de viviendas, en un entorno que en la
mayoría de los casos solía ser rural y que fuera autosuficiente.
Tal y como promulgaba el consejo de Administración de GESA en el boletín de marzo
de 1958, la empresa deseaba que los trabajadores y sus familias, que por motivos
laborales tuvieran que residir en el Puerto de Alcudia, disfrutaran de todos los medios
necesarios para llevar a cabo una vida digna, equiparable a la de cualquier otro sitio. Por
este motivo, la empresa proporcionaba a los empleados viviendas que destacan por su
modernidad a la vez que confortabilidad; un economato en el que se pudieran
suministrar de todas sus necesidades alimentarias e incluso calzar y vestir a precios de
coste; una escuela para sus hijos con áreas de esparcimiento y zonas deportivas; un
convento para las monjas, y una capilla (proyectada en 1957 e inaugurada el 1 de julio
de 1960).
Con esta idea se erigió, junto con la Central Térmica, el Poblado de GESA,
proyectado por el arquitecto Josep Ferragut Pou, con la intención de dotar al poblado de
todos los servicios necesarios para garantizar un funcionamiento autosuficiente.
Josep Ferragut Pou (Palma, 1912-1968), estudió la carrera de arquitectura en la
Escuela de Arquitectura de Barcelona. En 1942, una vez terminada su formación,
empezó su actividad profesional en Mallorca, en plena crisis post-bélica, donde siempre
ejerció hasta su muerte. La obra de Ferragut se desarrolló en dos grandes etapas: la
primera, de la década de los cuarenta hasta la mitad de los cincuenta. La segunda, de la
segunda mitad de los años cincuenta hasta 1969.
Después de una primera etapa dentro de la línea clasicista de Gabriel Alomar, con
quien colaboró nada más titularse, a partir de la década de los cincuenta empezó con las
primeras aproximaciones al lenguaje de la arquitectura moderna, gracias a la nueva
situación económica y social, fruto de la transformación económica que supuso el
desarrollo turístico y la necesidad de crear una imagen de modernidad y vanguardia, a la
vez que se ponía en sintonía con lo que ocurría a nivel internacional. Durante esta
época, Ferragut llevó adelante muchos encargos en la zona de Alcúdia como el Mal PasLa Victòria (1964), Estany Esperança (1966), Barcarès (1968) y otros, caracterizándose
por diseños más tradicionales que responden a encargos de particulares y por un
lenguaje más renovador los de carácter público o eclesiástico, como el Poblado de
GESA en Alcúdia, la Iglesia de la Porciúncula, la Iglesia de San Agustín, etc.
De entre los diferentes profesionales que iniciaron su trayectoria acabada la Guerra
Civil, probablemente sea Josep Ferragut el primero en retomar el discurso arquitectónico
anterior, a la vez que iba incorporando los temas y las propuestas del discurso
internacional, dando como resultado obras funcionales, progresistas, con claras
referencias, entre otros, a Charles-Édouard Jeanneret-Gris (Le Corbusier) (1887-1965),
José Antonio Coderch (1913-1984), Miguel Fisac (1913-2006) o Ludwig Mies Van der
Rohe (1886-1969). Dentro de esta línea innovadora no es extraño pues, que cuando
recibió el encargo de proyectar un poblado para la empresa GESA, se decantara por
utilizar en su obra un lenguaje plenamente contemporáneo, con clara referencia a toda la
arquitectura internacional que se estaba desarrollando en aquellos momentos,

cve: BOE-A-2023-13214
Verificable en https://www.boe.es

2.3