I. Disposiciones generales. JEFATURA DEL ESTADO. Desarrollo sostenible y solidaridad global. (BOE-A-2023-4512)
Ley 1/2023, de 20 de febrero, de Cooperación para el Desarrollo Sostenible y la Solidaridad Global.
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BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Martes 21 de febrero de 2023
Sec. I. Pág. 26100
Los ODS mencionan por primera vez la migración y el objetivo de facilitar unos flujos
migratorios regulares, seguros y ordenados. El Pacto Mundial para la Migración
desarrolla este objetivo y define a los migrantes como actores de desarrollo. Este
enfoque integral de la migración centrado en las personas y el desarrollo sostenible será
parte de la cooperación al desarrollo. Asimismo, el Pacto Mundial sobre los Refugiados
apuesta por la cooperación internacional y el principio de responsabilidad compartida
para responder a las situaciones de refugiados.
Para responder a las metas globales de desarrollo, las instituciones de la Unión
Europea y los Estados miembros han reiterado su compromiso de alcanzar
colectivamente el 0,7 % de la renta nacional bruta (en adelante, RNB) como ayuda al
desarrollo en el plazo previsto por la Agenda 2030, y han adoptado el Consenso Europeo
de Desarrollo (en lo sucesivo, CED), como estrategia común con enfoque de derechos
humanos. Para ser más eficaces, el CED propone un mayor trabajo en común como
Unión Europea, de conformidad con los principios de coherencia, coordinación y
complementariedad. Ello supone enfoques diferenciados para cada país socio, y formas
innovadoras de asociación vía cooperación Sur-Sur y triangular e iniciativas globales.
Ese esfuerzo promoverá también los objetivos de fortalecimiento del multilateralismo y la
resiliencia de la Unión Europea ante un escenario mundial de múltiples riesgos
interconectados.
Asumiendo ese marco multilateral y europeo, esta ley promueve una reforma
profunda y amplia de la cooperación española para el desarrollo sostenible, conforme
con los principios de buena regulación, de necesidad, eficacia, proporcionalidad,
seguridad jurídica, y transparencia, inspirada en los valores de solidaridad de la sociedad
española; de responsabilidad de España en tanto que actor en el ámbito internacional y
de cooperación ante los grandes desafíos que afronta el mundo. Esta ley impulsa un
nuevo paradigma de la cooperación al desarrollo sostenible en su doble vertiente de
política pública y elemento integral, central y definitorio de la acción exterior del Estado a
partir de una visión transformadora. En este contexto, la renovada cooperación española
promoverá la sostenibilidad en todas sus dimensiones, fomentando la inclusión y la
participación, la igualdad y la equidad, la transparencia y la responsabilidad, de forma
que nadie quede atrás, considerando todos los factores de discriminación y su
intersección.
La igualdad de género y el empoderamiento de mujeres, niñas y adolescentes son un
elemento transversal clave del sistema de cooperación de nuestro país. Es así, que la
cooperación española ha realizado un proceso progresivo de integración del enfoque de
género, desde el año 2005 hasta la actualidad, aplicando la doble estrategia de
transversalidad y empoderamiento de las mujeres, adolescentes y niñas en todos sus
procesos e instrumentos: desde la planificación a la gestión, el seguimiento y la
evaluación.
De esta forma ha quedado reflejado en los sucesivos Planes Directores, siendo la
igualdad de género reconocida como una de las señas de identidad de la política para el
desarrollo española.
La propia Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres
y hombres, en su artículo 32, reconoce la Estrategia Sectorial de Género en Desarrollo
de la cooperación española como el vehículo para aplicar la referida ley en este ámbito,
convirtiéndose en una de las primeras estrategias en el contexto internacional en
reconocer el legado feminista en su aplicación.
Todo este compromiso continuado conforma la política exterior feminista española,
de la que son parte fundamental la política para el desarrollo y la acción humanitaria. Por
eso, esta nueva ley de cooperación se compromete a consolidar la integración del
enfoque de género en el desarrollo de todos los instrumentos de gestión, reforzando
capacidades, asumiendo un compromiso mayor por la lucha contra todas las formas de
violencia de género y de discriminación, promoviendo el empoderamiento de las
mujeres, niñas y adolescentes en todos los ámbitos.
cve: BOE-A-2023-4512
Verificable en https://www.boe.es
Núm. 44
Martes 21 de febrero de 2023
Sec. I. Pág. 26100
Los ODS mencionan por primera vez la migración y el objetivo de facilitar unos flujos
migratorios regulares, seguros y ordenados. El Pacto Mundial para la Migración
desarrolla este objetivo y define a los migrantes como actores de desarrollo. Este
enfoque integral de la migración centrado en las personas y el desarrollo sostenible será
parte de la cooperación al desarrollo. Asimismo, el Pacto Mundial sobre los Refugiados
apuesta por la cooperación internacional y el principio de responsabilidad compartida
para responder a las situaciones de refugiados.
Para responder a las metas globales de desarrollo, las instituciones de la Unión
Europea y los Estados miembros han reiterado su compromiso de alcanzar
colectivamente el 0,7 % de la renta nacional bruta (en adelante, RNB) como ayuda al
desarrollo en el plazo previsto por la Agenda 2030, y han adoptado el Consenso Europeo
de Desarrollo (en lo sucesivo, CED), como estrategia común con enfoque de derechos
humanos. Para ser más eficaces, el CED propone un mayor trabajo en común como
Unión Europea, de conformidad con los principios de coherencia, coordinación y
complementariedad. Ello supone enfoques diferenciados para cada país socio, y formas
innovadoras de asociación vía cooperación Sur-Sur y triangular e iniciativas globales.
Ese esfuerzo promoverá también los objetivos de fortalecimiento del multilateralismo y la
resiliencia de la Unión Europea ante un escenario mundial de múltiples riesgos
interconectados.
Asumiendo ese marco multilateral y europeo, esta ley promueve una reforma
profunda y amplia de la cooperación española para el desarrollo sostenible, conforme
con los principios de buena regulación, de necesidad, eficacia, proporcionalidad,
seguridad jurídica, y transparencia, inspirada en los valores de solidaridad de la sociedad
española; de responsabilidad de España en tanto que actor en el ámbito internacional y
de cooperación ante los grandes desafíos que afronta el mundo. Esta ley impulsa un
nuevo paradigma de la cooperación al desarrollo sostenible en su doble vertiente de
política pública y elemento integral, central y definitorio de la acción exterior del Estado a
partir de una visión transformadora. En este contexto, la renovada cooperación española
promoverá la sostenibilidad en todas sus dimensiones, fomentando la inclusión y la
participación, la igualdad y la equidad, la transparencia y la responsabilidad, de forma
que nadie quede atrás, considerando todos los factores de discriminación y su
intersección.
La igualdad de género y el empoderamiento de mujeres, niñas y adolescentes son un
elemento transversal clave del sistema de cooperación de nuestro país. Es así, que la
cooperación española ha realizado un proceso progresivo de integración del enfoque de
género, desde el año 2005 hasta la actualidad, aplicando la doble estrategia de
transversalidad y empoderamiento de las mujeres, adolescentes y niñas en todos sus
procesos e instrumentos: desde la planificación a la gestión, el seguimiento y la
evaluación.
De esta forma ha quedado reflejado en los sucesivos Planes Directores, siendo la
igualdad de género reconocida como una de las señas de identidad de la política para el
desarrollo española.
La propia Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres
y hombres, en su artículo 32, reconoce la Estrategia Sectorial de Género en Desarrollo
de la cooperación española como el vehículo para aplicar la referida ley en este ámbito,
convirtiéndose en una de las primeras estrategias en el contexto internacional en
reconocer el legado feminista en su aplicación.
Todo este compromiso continuado conforma la política exterior feminista española,
de la que son parte fundamental la política para el desarrollo y la acción humanitaria. Por
eso, esta nueva ley de cooperación se compromete a consolidar la integración del
enfoque de género en el desarrollo de todos los instrumentos de gestión, reforzando
capacidades, asumiendo un compromiso mayor por la lucha contra todas las formas de
violencia de género y de discriminación, promoviendo el empoderamiento de las
mujeres, niñas y adolescentes en todos los ámbitos.
cve: BOE-A-2023-4512
Verificable en https://www.boe.es
Núm. 44