I. Disposiciones generales. COMUNIDAD AUTÓNOMA DE ARAGÓN. Economía social. (BOE-A-2023-496)
Ley 7/2022, de 1 de diciembre, de Economía Social de Aragón.
23 páginas totales
Página
Zahoribo únicamente muestra información pública que han sido publicada previamente por organismos oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Lunes 9 de enero de 2023
Sec. I. Pág. 3576
inspiran el discurrir de estas entidades. Todos estos principios contribuyen a la
consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y al cumplimiento de la
Agenda 2030 establecida por las Naciones Unidas.
Diferentes estudios constatan el importante papel que juega la economía social en la
sociedad actual. Entre otros aspectos, se destaca el rol fundamental que desempeñan
las organizaciones de la economía social a nivel económico y social en los territorios y la
capacidad de estas organizaciones para responder de manera satisfactoria al difícil
contexto socioeconómico marcado por las crisis vividas en España y Aragón. Y es que
estas organizaciones surgen históricamente como una respuesta de las clases sociales
más desprotegidas y desfavorecidas que, estructuradas en organizaciones de
autoayuda, se unen para hacer frente a las duras condiciones laborales y de vida a las
que se enfrentan. Estas entidades han aportado además soluciones positivas y
novedosas a través de diversas formas y actuaciones, tanto en lo empresarial como en
lo social y comunitario, que sirven de ejemplo a otros modelos empresariales que
apuestan cada vez más por el principio de desarrollo sostenible en sus tres vertientes:
económica, social y ambiental. Esto se debe a que el sistema de gobernanza de las
organizaciones de economía social está basado en modelos democráticos y
participativos, capaces de generar relaciones y tejido social que favorece la corrección
de los desequilibrios territoriales, apoya la aparición de procesos de desarrollo endógeno
en zonas rurales y estimula la revitalización de actividades económicas en declive,
siendo un aliado fundamental en el desarrollo de políticas públicas de empleo y
emprendimiento.
De hecho, estas organizaciones tienen un núcleo y origen histórico común, con una
larga tradición en Aragón, contando con una amplia presencia de las familias de
organizaciones que conforman este sector y llevando a cabo su actividad en los
principales sectores del territorio, contribuyendo de esta forma al crecimiento económico
y desarrollo social en nuestra Comunidad Autónoma. Los aragoneses y aragonesas se
han agrupado en cooperativas y asociaciones con actividad económica en la práctica
totalidad de los municipios del territorio y son varias las fundaciones y cooperativas
agroalimentarias que han superado con solvencia los cien años de antigüedad. A esto se
añade la fortaleza del cooperativismo de crédito con presencia en la comunidad, que ha
permitido que la inclusión financiera llegue a los espacios más alejados de los principales
núcleos de población. Según datos de CEPES Aragón (Asociación de Economía Social
de Aragón), en la actualidad, más de 20.000 personas trabajan en las entidades del
sector y, en general, más de cuatrocientas mil personas participan, colaboran o forman
parte de asociaciones, fundaciones, cooperativas, mutuas, sociedades laborales,
empresas de inserción y centros especiales de empleo, entre otras entidades, lo que
representa que una de cada tres personas aragonesas está vinculada a alguna de las
organizaciones que configuran la Economía Social.
Además, Aragón es una de las regiones mejor organizadas y estructuradas en este
ámbito. Las plataformas de la economía social son especialmente activas y desarrollan
una labor fundamental a través de diversas actuaciones e iniciativas encaminadas, entre
otros fines, a defender los intereses de la economía social aragonesa, a fortalecer el
desarrollo de la actividad empresarial y profesional de sus entidades, o a favorecer la
integración de la economía social en el discurso político y su promoción desde los entes
públicos. De acuerdo con los informes publicados por la Universidad de Zaragoza, en
Aragón existen doce plataformas de referencia que representan y defienden los intereses
de las distintas familias de la economía social: AREI (Asociación Aragonesa de
Empresas de Inserción); ASES Aragón (Asociación Aragonesa de Cooperativas y
Sociedades Laborales); CAA (Cooperativas Agroalimentarias de Aragón); CERMI Aragón
(Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad); Consejo
Aragonés de Fundaciones de la Asociación Española de Fundaciones (AEF);
Coordinadora Aragonesa de Voluntariado; FAS (Federación Aragonesa de Solidaridad);
PADIS (Patronal Aragonesa de la Discapacidad); Plataforma de Voluntariado de Aragón;
REAS Aragón (Red de Economía Alternativa y Solidaria de Aragón); Red EAPN Aragón
cve: BOE-A-2023-496
Verificable en https://www.boe.es
Núm. 7
Lunes 9 de enero de 2023
Sec. I. Pág. 3576
inspiran el discurrir de estas entidades. Todos estos principios contribuyen a la
consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y al cumplimiento de la
Agenda 2030 establecida por las Naciones Unidas.
Diferentes estudios constatan el importante papel que juega la economía social en la
sociedad actual. Entre otros aspectos, se destaca el rol fundamental que desempeñan
las organizaciones de la economía social a nivel económico y social en los territorios y la
capacidad de estas organizaciones para responder de manera satisfactoria al difícil
contexto socioeconómico marcado por las crisis vividas en España y Aragón. Y es que
estas organizaciones surgen históricamente como una respuesta de las clases sociales
más desprotegidas y desfavorecidas que, estructuradas en organizaciones de
autoayuda, se unen para hacer frente a las duras condiciones laborales y de vida a las
que se enfrentan. Estas entidades han aportado además soluciones positivas y
novedosas a través de diversas formas y actuaciones, tanto en lo empresarial como en
lo social y comunitario, que sirven de ejemplo a otros modelos empresariales que
apuestan cada vez más por el principio de desarrollo sostenible en sus tres vertientes:
económica, social y ambiental. Esto se debe a que el sistema de gobernanza de las
organizaciones de economía social está basado en modelos democráticos y
participativos, capaces de generar relaciones y tejido social que favorece la corrección
de los desequilibrios territoriales, apoya la aparición de procesos de desarrollo endógeno
en zonas rurales y estimula la revitalización de actividades económicas en declive,
siendo un aliado fundamental en el desarrollo de políticas públicas de empleo y
emprendimiento.
De hecho, estas organizaciones tienen un núcleo y origen histórico común, con una
larga tradición en Aragón, contando con una amplia presencia de las familias de
organizaciones que conforman este sector y llevando a cabo su actividad en los
principales sectores del territorio, contribuyendo de esta forma al crecimiento económico
y desarrollo social en nuestra Comunidad Autónoma. Los aragoneses y aragonesas se
han agrupado en cooperativas y asociaciones con actividad económica en la práctica
totalidad de los municipios del territorio y son varias las fundaciones y cooperativas
agroalimentarias que han superado con solvencia los cien años de antigüedad. A esto se
añade la fortaleza del cooperativismo de crédito con presencia en la comunidad, que ha
permitido que la inclusión financiera llegue a los espacios más alejados de los principales
núcleos de población. Según datos de CEPES Aragón (Asociación de Economía Social
de Aragón), en la actualidad, más de 20.000 personas trabajan en las entidades del
sector y, en general, más de cuatrocientas mil personas participan, colaboran o forman
parte de asociaciones, fundaciones, cooperativas, mutuas, sociedades laborales,
empresas de inserción y centros especiales de empleo, entre otras entidades, lo que
representa que una de cada tres personas aragonesas está vinculada a alguna de las
organizaciones que configuran la Economía Social.
Además, Aragón es una de las regiones mejor organizadas y estructuradas en este
ámbito. Las plataformas de la economía social son especialmente activas y desarrollan
una labor fundamental a través de diversas actuaciones e iniciativas encaminadas, entre
otros fines, a defender los intereses de la economía social aragonesa, a fortalecer el
desarrollo de la actividad empresarial y profesional de sus entidades, o a favorecer la
integración de la economía social en el discurso político y su promoción desde los entes
públicos. De acuerdo con los informes publicados por la Universidad de Zaragoza, en
Aragón existen doce plataformas de referencia que representan y defienden los intereses
de las distintas familias de la economía social: AREI (Asociación Aragonesa de
Empresas de Inserción); ASES Aragón (Asociación Aragonesa de Cooperativas y
Sociedades Laborales); CAA (Cooperativas Agroalimentarias de Aragón); CERMI Aragón
(Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad); Consejo
Aragonés de Fundaciones de la Asociación Española de Fundaciones (AEF);
Coordinadora Aragonesa de Voluntariado; FAS (Federación Aragonesa de Solidaridad);
PADIS (Patronal Aragonesa de la Discapacidad); Plataforma de Voluntariado de Aragón;
REAS Aragón (Red de Economía Alternativa y Solidaria de Aragón); Red EAPN Aragón
cve: BOE-A-2023-496
Verificable en https://www.boe.es
Núm. 7