III. Otras disposiciones. MINISTERIO DE CULTURA Y DEPORTE. Patrimonio cultural inmaterial. (BOE-A-2022-254)
Resolución de 3 de enero de 2022, de la Dirección General de Bellas Artes, por la que se incoa expediente de declaración del belenismo como manifestación representativa del patrimonio cultural inmaterial.
18 páginas totales
Página
Zahoribo únicamente muestra información pública que han sido publicada previamente por organismos oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Núm. 4
Miércoles 5 de enero de 2022
Sec. III. Pág. 1178
través de la sede electrónica del departamento, y alegar lo que estimen conveniente por
un periodo de veinte días a contar desde el día siguiente a la publicación de la presente
Resolución en el Boletín Oficial del Estado.
Tercero.
Tramitar el correspondiente expediente de declaración de Manifestación
Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial, de acuerdo con lo previsto en la
Ley 10/2015, de 26 de mayo.
Cuarto.
Comunicar la incoación al Inventario General de Patrimonio Cultural Inmaterial para
su anotación preventiva.
Madrid, 3 de enero de 2022.–El Director General de Bellas Artes, Isaac Sastre de
Diego.
ANEXO
La acción de montar el Belén es una tradición de religiosidad popular que tuvo su
origen en la Europa Medieval y que consiste en construir una escenografía formada por
escenario y figuras sistematizables que se arman o montan cíclicamente coincidiendo
con la época de Navidad y que evoca, directa o indirectamente, pasajes relacionados
con el nacimiento de Jesús. Se trata, por lo general, de construcciones efímeras y
estacionales, de un pequeño universo reducido, que alberga personas, animales y
casas. Hoy en día, el belén trasciende lo estrictamente religioso para encuadrarse en
una dimensión más amplia, la cultural, convirtiéndose en un hecho sociológico.
El Belenismo comprende tanto al arte de fabricar las figuras del Belén a través de
sus artesanos, como al colectivo especializado en armar o montar el Belén, empleando
ciertos conocimientos y destrezas, en un proceso en el que se aplican técnicas y
prácticas tradicionales y actuales, transmitiendo al espectador sensaciones emocionales
y simbólicas, que inundan los sentidos mediante la recreación de cada escena, olores
característicos como el del musgo y del corcho y las diferentes texturas de sus figuras,
construcciones y elementos complementarios.
En el primer grupo, formado por los artesanos y fabricantes de figuras y demás
elementos del Belén, los conocimientos suelen transmitirse de una generación a otra en
el seno de grupos familiares o talleres, siguiendo una trayectoria estilística mantenida
con escasas variaciones a través del tiempo, que determina desde el punto de vista
estético áreas culturales distintas. El segundo grupo, formado por diseñadores y
montadores, no siempre procede de una formación consuetudinaria como en el caso
anterior, sino que se corresponde con personas creadoras, profesionales, en las que
confluyen ciertos conocimientos de historia, paisajismo, decoración, diseño, electricidad,
pintura, fontanería, albañilería, carpintería, matemáticas y botánica. En ambos grupos se
pone de manifiesto el buen gusto, la paciencia, la tenacidad y el cariño, sin olvidar la
religiosidad, arte, costumbres, tradiciones, cultura e ingenio.
Son muchos los valores culturales que presenta el Belenismo, que justifican por tanto
su declaración:
El Belenismo conforma un Patrimonio Cultural Inmaterial con fuerte carga identitaria.
Incluye una serie de manifestaciones y expresiones muy representativas para buena
parte del territorio español, primando el valor de la diversidad que este tipo de patrimonio
representa, creando y compartiendo una identidad colectiva. Está instalado en
prácticamente todas las regiones españolas.
cve: BOE-A-2022-254
Verificable en https://www.boe.es
Justificación de la declaración
Núm. 4
Miércoles 5 de enero de 2022
Sec. III. Pág. 1178
través de la sede electrónica del departamento, y alegar lo que estimen conveniente por
un periodo de veinte días a contar desde el día siguiente a la publicación de la presente
Resolución en el Boletín Oficial del Estado.
Tercero.
Tramitar el correspondiente expediente de declaración de Manifestación
Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial, de acuerdo con lo previsto en la
Ley 10/2015, de 26 de mayo.
Cuarto.
Comunicar la incoación al Inventario General de Patrimonio Cultural Inmaterial para
su anotación preventiva.
Madrid, 3 de enero de 2022.–El Director General de Bellas Artes, Isaac Sastre de
Diego.
ANEXO
La acción de montar el Belén es una tradición de religiosidad popular que tuvo su
origen en la Europa Medieval y que consiste en construir una escenografía formada por
escenario y figuras sistematizables que se arman o montan cíclicamente coincidiendo
con la época de Navidad y que evoca, directa o indirectamente, pasajes relacionados
con el nacimiento de Jesús. Se trata, por lo general, de construcciones efímeras y
estacionales, de un pequeño universo reducido, que alberga personas, animales y
casas. Hoy en día, el belén trasciende lo estrictamente religioso para encuadrarse en
una dimensión más amplia, la cultural, convirtiéndose en un hecho sociológico.
El Belenismo comprende tanto al arte de fabricar las figuras del Belén a través de
sus artesanos, como al colectivo especializado en armar o montar el Belén, empleando
ciertos conocimientos y destrezas, en un proceso en el que se aplican técnicas y
prácticas tradicionales y actuales, transmitiendo al espectador sensaciones emocionales
y simbólicas, que inundan los sentidos mediante la recreación de cada escena, olores
característicos como el del musgo y del corcho y las diferentes texturas de sus figuras,
construcciones y elementos complementarios.
En el primer grupo, formado por los artesanos y fabricantes de figuras y demás
elementos del Belén, los conocimientos suelen transmitirse de una generación a otra en
el seno de grupos familiares o talleres, siguiendo una trayectoria estilística mantenida
con escasas variaciones a través del tiempo, que determina desde el punto de vista
estético áreas culturales distintas. El segundo grupo, formado por diseñadores y
montadores, no siempre procede de una formación consuetudinaria como en el caso
anterior, sino que se corresponde con personas creadoras, profesionales, en las que
confluyen ciertos conocimientos de historia, paisajismo, decoración, diseño, electricidad,
pintura, fontanería, albañilería, carpintería, matemáticas y botánica. En ambos grupos se
pone de manifiesto el buen gusto, la paciencia, la tenacidad y el cariño, sin olvidar la
religiosidad, arte, costumbres, tradiciones, cultura e ingenio.
Son muchos los valores culturales que presenta el Belenismo, que justifican por tanto
su declaración:
El Belenismo conforma un Patrimonio Cultural Inmaterial con fuerte carga identitaria.
Incluye una serie de manifestaciones y expresiones muy representativas para buena
parte del territorio español, primando el valor de la diversidad que este tipo de patrimonio
representa, creando y compartiendo una identidad colectiva. Está instalado en
prácticamente todas las regiones españolas.
cve: BOE-A-2022-254
Verificable en https://www.boe.es
Justificación de la declaración