I. Disposiciones generales. MINISTERIO DE TRABAJO Y ECONOMÍA SOCIAL. Política de empleo. (BOE-A-2021-20632)
Resolución de 9 de diciembre de 2021, de la Secretaría de Estado de Empleo y Economía Social, por la que se publica el Acuerdo de Consejo de Ministros de 3 de diciembre de 2021, por el que se aprueba el Plan Anual de Política de Empleo para 2021, según lo establecido en el artículo 11.2 del texto refundido de la Ley de Empleo, aprobado por el Real Decreto Legislativo 3/2015, de 23 de octubre.
217 páginas totales
Página
Zahoribo únicamente muestra información pública que han sido publicada previamente por organismos oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Miércoles 15 de diciembre de 2021
Sec. I. Pág. 153369
Otros sectores, como el de la automoción, también está sufriendo un significativo
proceso de transformación debido a los requerimientos de una movilidad sostenible que
reduzca el nivel de emisiones, junto a un profundo cambio tecnológico, fruto del avance
acelerado de la digitalización.
Por el contrario, algunos sectores han resultado beneficiados como consecuencia de
los efectos de la pandemia. En primer lugar, podemos destacar el comercio electrónico y
otros sectores asociados al crecimiento de la actividad comercial en Internet, como son
la logística, el transporte de mercancías y las entregas a domicilio. El impulso del
comercio online y el teletrabajo también han favorecido al sector de la informática y de
las comunicaciones. Asimismo, los sectores de ocio doméstico, farmacéutico, sanitario y
comercio de productos alimentarios están experimentando incrementos de actividad
productiva.
A su vez, hay mecanismos de adaptación que se han revelado eficaces en este
contexto y se están consolidando, como son el crecimiento del comercio electrónico, la
extensión del teletrabajo o la digitalización de los procesos productivos y la gestión de
las empresas.
En los próximos años los mencionados procesos de digitalización y sostenibilidad
van a potenciar aún más el crecimiento del empleo en sectores relacionados con
diversas ingenierías, comunicación y redes sociales, diseño gráfico, energías renovables
y tratamiento de residuos.
Por otro lado, debido al progresivo envejecimiento de la población española, los
siguientes sectores tendrán previsiblemente un crecimiento de la empleabilidad a medio
plazo: sanitario, farmacéutico, servicios sociales y, en particular, cuidados a personas
dependientes en el hogar.
Ante la situación actual, es preciso desplegar una serie de medidas encaminadas a
impulsar y remodelar el mercado laboral. Los fondos europeos y el Plan de
Recuperación, Transformación y Resiliencia están destinados a la modernización de la
economía española y deben asignarse a proyectos tractores que impulsen sectores
estratégicos y cadenas de valor, que tiendan a un proceso de reindustrialización para
evitar la dependencia de productos y tecnologías esenciales.
La rápida evolución tecnológica está produciendo cambios que inciden en muchos
perfiles profesionales, que deben adecuarse a los nuevos requerimientos y formas de
trabajar. Procesos como el de la digitalización pueden suponer un riesgo de mayor
polarización en la estructura del empleo, que refleja el reducido peso de la población con
niveles formativos intermedios y la concentración en los extremos. La transformación
tecnológica también puede generar déficit de profesionales en algunas ocupaciones,
como es el caso de los perfiles especializados en Ciencias, Tecnología, Ingeniería y
Matemáticas (CTIM o STEM). En consecuencia, se deben llevar a cabo acciones que
refuercen la formación y recualificación profesional de los trabajadores, que les capaciten
para la promoción profesional o para reorientar su trayectoria a sectores con mejores
perspectivas.
En una sociedad basada en el conocimiento, la formación en investigación es un
elemento clave en la actualidad. La necesidad de incrementar el número de personas
con competencias de investigación e innovación es uno de los principales desafíos que
nos encontramos.
Junto a la mencionada formación tecnológica, también existe una urgente necesidad
formativa para facilitar el acceso al primer empleo en el caso de la población joven. La
recuperación del mercado laboral de los jóvenes está siendo más lenta que la de otros
colectivos. Dentro del colectivo juvenil se identifican muy diferentes subgrupos, entre los
que hay que destacar aquellos que no trabajan ni estudian, el de jóvenes activos, pero
sin cualificación (cabe recordar aquí la elevada frecuencia del abandono escolar
temprano, que fue del 17,3% en 2019), los «jóvenes desanimados» y, especialmente, en
el tramo de edad entre 25 y 30 años.
En resumen, los efectos de la pandemia están modificando rápidamente el modo de
trabajar en general y, además, van a producir un trasvase de empleo entre algunos
cve: BOE-A-2021-20632
Verificable en https://www.boe.es
Núm. 299
Miércoles 15 de diciembre de 2021
Sec. I. Pág. 153369
Otros sectores, como el de la automoción, también está sufriendo un significativo
proceso de transformación debido a los requerimientos de una movilidad sostenible que
reduzca el nivel de emisiones, junto a un profundo cambio tecnológico, fruto del avance
acelerado de la digitalización.
Por el contrario, algunos sectores han resultado beneficiados como consecuencia de
los efectos de la pandemia. En primer lugar, podemos destacar el comercio electrónico y
otros sectores asociados al crecimiento de la actividad comercial en Internet, como son
la logística, el transporte de mercancías y las entregas a domicilio. El impulso del
comercio online y el teletrabajo también han favorecido al sector de la informática y de
las comunicaciones. Asimismo, los sectores de ocio doméstico, farmacéutico, sanitario y
comercio de productos alimentarios están experimentando incrementos de actividad
productiva.
A su vez, hay mecanismos de adaptación que se han revelado eficaces en este
contexto y se están consolidando, como son el crecimiento del comercio electrónico, la
extensión del teletrabajo o la digitalización de los procesos productivos y la gestión de
las empresas.
En los próximos años los mencionados procesos de digitalización y sostenibilidad
van a potenciar aún más el crecimiento del empleo en sectores relacionados con
diversas ingenierías, comunicación y redes sociales, diseño gráfico, energías renovables
y tratamiento de residuos.
Por otro lado, debido al progresivo envejecimiento de la población española, los
siguientes sectores tendrán previsiblemente un crecimiento de la empleabilidad a medio
plazo: sanitario, farmacéutico, servicios sociales y, en particular, cuidados a personas
dependientes en el hogar.
Ante la situación actual, es preciso desplegar una serie de medidas encaminadas a
impulsar y remodelar el mercado laboral. Los fondos europeos y el Plan de
Recuperación, Transformación y Resiliencia están destinados a la modernización de la
economía española y deben asignarse a proyectos tractores que impulsen sectores
estratégicos y cadenas de valor, que tiendan a un proceso de reindustrialización para
evitar la dependencia de productos y tecnologías esenciales.
La rápida evolución tecnológica está produciendo cambios que inciden en muchos
perfiles profesionales, que deben adecuarse a los nuevos requerimientos y formas de
trabajar. Procesos como el de la digitalización pueden suponer un riesgo de mayor
polarización en la estructura del empleo, que refleja el reducido peso de la población con
niveles formativos intermedios y la concentración en los extremos. La transformación
tecnológica también puede generar déficit de profesionales en algunas ocupaciones,
como es el caso de los perfiles especializados en Ciencias, Tecnología, Ingeniería y
Matemáticas (CTIM o STEM). En consecuencia, se deben llevar a cabo acciones que
refuercen la formación y recualificación profesional de los trabajadores, que les capaciten
para la promoción profesional o para reorientar su trayectoria a sectores con mejores
perspectivas.
En una sociedad basada en el conocimiento, la formación en investigación es un
elemento clave en la actualidad. La necesidad de incrementar el número de personas
con competencias de investigación e innovación es uno de los principales desafíos que
nos encontramos.
Junto a la mencionada formación tecnológica, también existe una urgente necesidad
formativa para facilitar el acceso al primer empleo en el caso de la población joven. La
recuperación del mercado laboral de los jóvenes está siendo más lenta que la de otros
colectivos. Dentro del colectivo juvenil se identifican muy diferentes subgrupos, entre los
que hay que destacar aquellos que no trabajan ni estudian, el de jóvenes activos, pero
sin cualificación (cabe recordar aquí la elevada frecuencia del abandono escolar
temprano, que fue del 17,3% en 2019), los «jóvenes desanimados» y, especialmente, en
el tramo de edad entre 25 y 30 años.
En resumen, los efectos de la pandemia están modificando rápidamente el modo de
trabajar en general y, además, van a producir un trasvase de empleo entre algunos
cve: BOE-A-2021-20632
Verificable en https://www.boe.es
Núm. 299