III. Otras disposiciones. COMUNIDAD DE CASTILLA Y LEÓN. Bienes de interés cultural. (BOE-A-2021-10655)
Acuerdo 63/2021, de 10 de junio, de la Junta de Castilla y León, por el que se declara la villa de Villasandino (Burgos) bien de interés cultural, con categoría de conjunto histórico.
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BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Viernes 25 de junio de 2021

Sec. III. Pág. 76698

ANEXO
Villa de Villasandino
Villasandino es una localidad burgalesa ubicada a orillas del río Odra, afluente del
Pisuerga, al borde de la antigua calzada romana Vía Aquitania que unía Astorga con
Burdeos, en un espacio geográfico eminentemente cerealista y ganadero, en un entorno
de páramos y campiñas.
El núcleo actual de Villasandino tiene su origen en la repoblación medieval de los
siglos IX y X. Perteneció al alfoz medieval de Treviño, según consta en documentación
fechada en 1029. Existen referencias en el Becerro Gótico de Cardeña del año 1051 y
mantiene históricamente la denominación de Campo de Treviño, por su pertenencia a
este alfoz desde el año 1184.
A lo largo de la Edad Media la villa fue creciendo en importancia, la cercanía del
Camino de Santiago que discurría y discurre por municipios vecinos, tuvo gran influencia
en la consolidación del núcleo. En la época del obispo don Mauricio (1213-1238), cuando
la villa perteneciente al realengo de Fernando II pasa al obispado burgalés, se construye
el puente sobre el río Odra, puerta de acceso a la localidad, que más tarde pasaría al
señorío de los Osorio y al señorío de los Villegas. Pascual Madoz, en su célebre
diccionario de 1846, cita la existencia de una casa fuerte con torre y restos de la antigua
muralla árabe, hoy desaparecidos.
El núcleo urbano de Villasandino queda dividido en dos barrios por el antiguo cauce
del arroyo que iba a desembocar al río Odra, hoy paseo de los Hermanos Gutiérrez
Manrique. Cada barrio posee una espléndida iglesia parroquial, claro reflejo de la
importancia de la villa.
El barrio norte conserva restos de su antigua muralla y, enfrentada al puente
medieval, la puerta que da acceso a la villa mediante un arco de medio punto con
escudo en piedra con las armas de Castilla. La perspectiva desde el otro lado del puente
constituye una de las imágenes más identificativas de la villa.
Este barrio se configura a partir de dos ejes, el eje del puente por la calle del río y su
prolongación con la calle del Hospital, que toma su nombre del hospital allí existente
hasta época reciente, para atender a los peregrinos del Camino de Santiago y, paralelo a
este, el eje formado por la calle Real de San Juan. La iglesia de la Asunción de Nuestra
Señora, de la segunda mitad del siglo XVI, considerada obra del círculo de Rodrigo Gil
de Hontañón, impresiona al exterior por su grandeza y su esbelta y sólida torre. El
templo sufre reformas y ampliaciones importantes sobre todo las realizadas a finales del
XVI por García de Arce y Juan de la Maza. De planta de salón con tres naves cubiertas
por bóvedas de crucería con terceletes destacan en su interior los retablos, en especial
las tablas del siglo XV de Jorge Inglés, el primer artista hispano-flamenco que trabajó en
Castilla y la tabla hispano-flamenca con la Santísima Trinidad, del Maestro de
Villasandino, del siglo XV. El magnífico órgano fue realizado en 1734 por Pedro Merino
de la Rosa, como atestigua la inscripción que alberga en su secreto.
El barrio sur sigue el eje de la calle del Carmen que da acceso a la iglesia de la
Natividad de Barriuso y el eje de la calle de San Antón, a la que se abre un amplio
espacio donde se encontraba una ermita hoy desaparecida.
La iglesia de la Natividad de Barriuso también del siglo XVI, destaca por la grandeza
de su fábrica y la robustez y altura de su torre, presenta ábside gótico y planta de salón
de tres naves con finísima nervadura. Aislada de todo tipo de construcciones, se alza
imponente en una zona periférica de borde de barrio desde donde se aprecia un paisaje
abierto, salteado de pequeñas construcciones populares en el que los palomares
distribuidos en medio de las tierras de cultivo, conforman un paisaje moteado de
volúmenes, singular documento histórico de una sociedad rural que ejercía el control
sobre el espacio circundante y los sistemas de explotación de los recursos del campo a
lo largo de los siglos.

cve: BOE-A-2021-10655
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Núm. 151