I. Disposiciones generales. COMUNIDAD AUTÓNOMA DE GALICIA. Residuos y suelos contaminados. (BOE-A-2021-5137)
Ley 6/2021, de 17 de febrero, de residuos y suelos contaminados de Galicia.
52 páginas totales
Página
Zahoribo únicamente muestra información pública que han sido publicada previamente por organismos oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Jueves 1 de abril de 2021

Sec. I. Pág. 37494

En diciembre de 2015 la Comisión Europea propuso un paquete de medidas con las
que se persigue transformar la economía lineal basada en el trinomio extraer-usar-y-tirar
en una economía circular en la que, donde antes había residuos, ahora existan recursos
potenciales que puedan ser utilizados de nuevo en el sistema de producción.
Ese paquete de medidas incluye un buen número de propuestas que tendrán un
impacto importante en los más diversos ámbitos, tanto el productivo y el económico
como el social, además del puramente ambiental.
El Plan de acción para la economía circular [COM(2015) 614 final], diseñado por la
Comisión Europea bajo el lema «cerrar el círculo», incluye toda una serie de propuestas
legislativas sobre residuos para reducir los depósitos en vertederos y aumentar la
preparación para su reutilización y reciclaje, así como un anexo con 54 medidas de
desarrollo en los ámbitos de la producción, el consumo, la gestión de residuos, el
mercado de materias primas secundarias y la reutilización del agua, determinadas áreas
prioritarias (plásticos, residuos alimentarios, materias primas críticas, construcción y
demolición, y biomasa y bioproductos), la innovación, la inversión y otras medidas
horizontales, y el seguimiento de los avances hacia una economía circular.
En materia de residuos y dentro de ese paquete de medidas, la Unión Europea
aprobó en el año 2018 varias directivas, cuyo plazo de transposición finaliza el 5 de julio
de 2020, que modifican la regulación en la materia: la Directiva (UE) 2018/849 del
Parlamento Europeo y del Consejo, de 30 de mayo de 2018, por la que se modifican la
Directiva 2000/53/CE, relativa a los vehículos al final de su vida útil, la
Directiva 2006/66/CE, relativa a las pilas y acumuladores y a los residuos de pilas y
acumuladores y la Directiva 2012/19/UE, sobre residuos de aparatos eléctricos y
electrónicos; la Directiva (UE) 2018/851 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 30 de
mayo de 2018, por la que se modifica la Directiva 2008/98/CE, sobre los residuos; la
Directiva (UE) 2018/850 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 30 de mayo de 2018,
por la que se modifica la Directiva 1999/31/CE, relativa al vertido de residuos; y la
Directiva (UE) 2018/852 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 30 de mayo de 2018,
por la que se modifica la Directiva 94/62/CE, relativa a los envases y residuos de
envases.
A este respecto, la Directiva (UE) 2018/851, antes citada, se aprobó bajo la
consideración de que la gestión de residuos en la Unión Europea debe mejorarse y
transformarse en una gestión sostenible de las materias orientada a proteger, preservar y
mejorar la calidad del ambiente, así como a proteger la salud humana, garantizar la
utilización prudente, eficiente y racional de los recursos naturales, promover los
principios de la economía circular, mejorar el uso de la energía renovable, aumentar la
eficiencia energética, reducir la dependencia de la Unión de los recursos importados,
crear nuevas oportunidades económicas y contribuir a la competitividad a largo plazo.
En este contexto, la Comisión llegó igualmente a la conclusión, en la Estrategia
europea sobre el plástico prevista en su Comunicación de 16 de enero de 2018, titulada
«Una estrategia europea para el plástico en una economía circular», de que debía
abordarse el aumento constante de la generación de residuos plásticos y del abandono
de esos residuos plásticos en el medio ambiente, en particular el medio marino, para
conseguir que el ciclo de vida de los plásticos sea circular. El importante impacto
negativo de determinados productos de plástico en el medio ambiente, la salud y la
economía exigían el establecimiento de un marco jurídico específico que permitiese
reducir eficazmente esos efectos negativos. Así, se aprobó la Directiva (UE) 2019/904
del Parlamento Europeo y del Consejo, de 5 de junio de 2019, relativa a la reducción del
impacto de determinados productos de plástico en el medio ambiente, también en
período de transposición.
En definitiva, como resalta el propio Plan de acción para la economía circular, hacer
realidad la economía circular exige un compromiso a todos los niveles, desde los
Estados miembros a las regiones y a las ciudades, pasando por las empresas y la
ciudadanía.

cve: BOE-A-2021-5137
Verificable en https://www.boe.es

Núm. 78