Ministerio de Trabajo y Economía Social. III. Otras disposiciones. Política de empleo. (BOE-A-2025-15915)
Resolución de 24 de julio de 2025, de la Secretaría de Estado de Trabajo, por la que se publica el Acuerdo del Consejo de Ministros de 15 de julio de 2025, por el que se aprueba el Plan Anual para el Fomento del Empleo Digno 2025.
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BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Jueves 31 de julio de 2025
Sec. III. Pág. 103486
desequilibrios fiscales, proporcionan una base sólida para hacer frente al escenario
actual, especialmente complejo y marcado por la intensa incertidumbre.
Así, la evolución del empleo constituye sin duda uno de los factores diferenciales del
ciclo iniciado tras la crisis COVID y una de las principales fortalezas actuales de la
economía española frente a los retos geopolíticos. Tradicionalmente, las salidas de las
crisis en España se han caracterizado por un fuerte ajuste del empleo y una
recuperación retardada respecto a la actividad, con los consiguientes costes
económicos, fiscales y sociales. Esta vez, el empleo se ha recuperado más rápido que el
propio PIB, alcanzándose niveles de ocupación pre-COVID ya a finales de 2021.
Además, esta recuperación ha venido acompañada de varias mejoras cualitativas
reflejadas en el aumento de la contratación indefinida, la reducción del desempleo juvenil
y la reasignación del empleo hacia sectores en expansión como el de la información y las
comunicaciones.
En este sentido, la reforma laboral, adoptada a finales de 2021, contribuye de forma
visible a mejorar la estabilidad y la calidad del empleo, lo que, con la importante inversión
en capital humano, contribuye a aumentar la productividad y el crecimiento potencial de
la economía. La ocupación española alcanza máximos históricos y superaba los 21,8
millones en el cuarto trimestre de 2024, al igual que la población activa, por encima de
los 24,4 millones. Los datos de 2025 confirman asimismo el impulso a la contratación
indefinida. El pasado mes de febrero de 2025, un 44 % de los contratos iniciales que se
firmaron en nuestro país tuvieron este carácter, reflejando un salto importante en
comparación con lo que era habitual antes de la reforma laboral, siendo solamente
un 10 % los contratos indefinidos iniciales los que se firmaban en el mismo mes de 2021,
frente al 44 % actual. Este incremento de la contratación indefinida está permitiendo
reducir la dualidad del mercado laboral en el corto plazo y el desempleo estructural en el
largo plazo. A la reducción del paro estructural también ha contribuido la creación del
Mecanismo RED, que consolida este nuevo patrón de recuperación, más justo y
equitativo, frente a futuras crisis.
Por otra parte, se tienen que seguir teniendo en cuenta dos hechos fundamentales
como son la guerra de Ucrania y el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
En el primer caso, para hacer frente al shock geopolítico que representa la guerra de
Rusia, el Gobierno aprobó el 29 de marzo de 2022 el Plan Nacional de respuesta al
impacto de la guerra que se vertebra en torno a ocho objetivos, apoyar a los sectores y
colectivos más vulnerables.
Respecto a lo segundo, el programa europeo de inversiones y reformas financiado
con los fondos Next Generation EU, sin precedentes en la historia de la UE, ha tenido un
impacto muy positivo y su ejecución total finalizará en el año 2026.
Ha habido una fuerte concentración de las inversiones y reformas del Plan en el
periodo 2021-2023, precisamente con el fin de maximizar su impacto contra cíclico y
lograr un impacto material sobre las palancas principales de crecimiento, impulsando el
capital humano, tecnológico y cultural, la I+D, la inversión en tecnologías disruptivas, la
digitalización de las empresas y las administraciones públicas, así como mejorando el
Estado de bienestar y reduciendo las desigualdades.
Concretamente en lo referente a la política de empleo, en el marco del
Componente 23 del Plan, de «nuevas políticas públicas para un mercado de trabajo
dinámico, resiliente e inclusivo», ya se ha concretado la política de empleo en su
conjunto.
Por su parte, el Programa Nacional de Reformas 2023 prescribía medidas tales como la
mejora de la empleabilidad y la inserción laboral, acercando el ámbito de la formación a las
necesidades del tejido productivo, especialmente en aquellos sectores estratégicos y en
relación con las necesarias transiciones verde y digital ya iniciadas, así como la
modernización del mercado de trabajo y de las políticas de empleo (activas y de protección
frente al desempleo), para contar con servicios de empleo más eficientes, mejorar las
condiciones de los trabajadores y garantizar la necesaria flexibilidad a las empresas para
que puedan adaptarse a los cambios coyunturales y estructurales del entorno.
cve: BOE-A-2025-15915
Verificable en https://www.boe.es
Núm. 183
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desequilibrios fiscales, proporcionan una base sólida para hacer frente al escenario
actual, especialmente complejo y marcado por la intensa incertidumbre.
Así, la evolución del empleo constituye sin duda uno de los factores diferenciales del
ciclo iniciado tras la crisis COVID y una de las principales fortalezas actuales de la
economía española frente a los retos geopolíticos. Tradicionalmente, las salidas de las
crisis en España se han caracterizado por un fuerte ajuste del empleo y una
recuperación retardada respecto a la actividad, con los consiguientes costes
económicos, fiscales y sociales. Esta vez, el empleo se ha recuperado más rápido que el
propio PIB, alcanzándose niveles de ocupación pre-COVID ya a finales de 2021.
Además, esta recuperación ha venido acompañada de varias mejoras cualitativas
reflejadas en el aumento de la contratación indefinida, la reducción del desempleo juvenil
y la reasignación del empleo hacia sectores en expansión como el de la información y las
comunicaciones.
En este sentido, la reforma laboral, adoptada a finales de 2021, contribuye de forma
visible a mejorar la estabilidad y la calidad del empleo, lo que, con la importante inversión
en capital humano, contribuye a aumentar la productividad y el crecimiento potencial de
la economía. La ocupación española alcanza máximos históricos y superaba los 21,8
millones en el cuarto trimestre de 2024, al igual que la población activa, por encima de
los 24,4 millones. Los datos de 2025 confirman asimismo el impulso a la contratación
indefinida. El pasado mes de febrero de 2025, un 44 % de los contratos iniciales que se
firmaron en nuestro país tuvieron este carácter, reflejando un salto importante en
comparación con lo que era habitual antes de la reforma laboral, siendo solamente
un 10 % los contratos indefinidos iniciales los que se firmaban en el mismo mes de 2021,
frente al 44 % actual. Este incremento de la contratación indefinida está permitiendo
reducir la dualidad del mercado laboral en el corto plazo y el desempleo estructural en el
largo plazo. A la reducción del paro estructural también ha contribuido la creación del
Mecanismo RED, que consolida este nuevo patrón de recuperación, más justo y
equitativo, frente a futuras crisis.
Por otra parte, se tienen que seguir teniendo en cuenta dos hechos fundamentales
como son la guerra de Ucrania y el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
En el primer caso, para hacer frente al shock geopolítico que representa la guerra de
Rusia, el Gobierno aprobó el 29 de marzo de 2022 el Plan Nacional de respuesta al
impacto de la guerra que se vertebra en torno a ocho objetivos, apoyar a los sectores y
colectivos más vulnerables.
Respecto a lo segundo, el programa europeo de inversiones y reformas financiado
con los fondos Next Generation EU, sin precedentes en la historia de la UE, ha tenido un
impacto muy positivo y su ejecución total finalizará en el año 2026.
Ha habido una fuerte concentración de las inversiones y reformas del Plan en el
periodo 2021-2023, precisamente con el fin de maximizar su impacto contra cíclico y
lograr un impacto material sobre las palancas principales de crecimiento, impulsando el
capital humano, tecnológico y cultural, la I+D, la inversión en tecnologías disruptivas, la
digitalización de las empresas y las administraciones públicas, así como mejorando el
Estado de bienestar y reduciendo las desigualdades.
Concretamente en lo referente a la política de empleo, en el marco del
Componente 23 del Plan, de «nuevas políticas públicas para un mercado de trabajo
dinámico, resiliente e inclusivo», ya se ha concretado la política de empleo en su
conjunto.
Por su parte, el Programa Nacional de Reformas 2023 prescribía medidas tales como la
mejora de la empleabilidad y la inserción laboral, acercando el ámbito de la formación a las
necesidades del tejido productivo, especialmente en aquellos sectores estratégicos y en
relación con las necesarias transiciones verde y digital ya iniciadas, así como la
modernización del mercado de trabajo y de las políticas de empleo (activas y de protección
frente al desempleo), para contar con servicios de empleo más eficientes, mejorar las
condiciones de los trabajadores y garantizar la necesaria flexibilidad a las empresas para
que puedan adaptarse a los cambios coyunturales y estructurales del entorno.
cve: BOE-A-2025-15915
Verificable en https://www.boe.es
Núm. 183