Comunidad Autónoma de Extremadura. III. Otras disposiciones. Bienes de interés cultural. (BOE-A-2025-2287)
Decreto 154/2024, de 12 de diciembre, por el que se declara bien de interés cultural la «Iglesia Parroquial de Nuestra señora de la Asunción» en la localidad de Malpartida de Cáceres (Cáceres), con la categoría de monumento.
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BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Núm. 32

Jueves 6 de febrero de 2025
Exterior.

En la arquitectura extremeña del s. XVI es común la fusión de elementos góticos
y renacentistas, tanto en la construcción como en la remodelación de sus iglesias
parroquiales. Será tendencia realizar sencillas estructuras góticas, diáfanas, predominando
la nave única con bóvedas de crucería y donde los elementos clasicistas en el interior
serán reducidos a algún soporte o puertas de acceso a sacristías o capillas, dejando
para el exterior las muestras renacentistas, que se centrarán en la portada de los pies.
Los trabajos de construcción se iniciaron el 2 de julio de 1528, dirigidos por un grupo
de canteros de la familia Moreno. Prosiguieron y terminaron, en 1565, con la atribución
de Sebastián de Aguirre.
La iglesia parroquial de Malpartida de Cáceres, realizada en piedra de cantería, es
de una sola nave con 3 tramos cubiertos con bóveda de crucería y cabecera cuadrada
con testero plano. Sobre el plano sobresale la sacristía, que se encuentra en el muro sur,
la torre –en el lado norte entre la capilla mayor y la nave–, y la capilla bautismal, en el
mismo muro y unida al tramo de los pies.
En cuanto a las portadas, destaca la portada principal, tal vez el elemento más
significativo del conjunto, orientada al oeste con una rica estética renacentista propia del
segundo tercio del s. XVI y atribuida a Sebastián de Aguirre. Esta portada plateresca,
labrada con granito de la zona, se abre con un arco de medio punto, suavemente
moldurado hasta las jambas, y enmarcado por dos columnas jónicas que descansan
sobre podios tapando así unas retropilastras jónicas con fustes estriados; entre las
volutas del capitel asoman pequeñas cabezas de ángeles. En las enjutas, se emplazan
las imágenes de San Pedro (con las llaves) y San Pablo (con la espada) encuadrados en
medallones, los cuales son portados por ángeles. Esta parte de la portada se cierra con
un friso corrido totalmente decorado con ángeles sosteniendo un clípeo, en los que se
alternan rostros humanos con efigies de la muerte (esqueletos de medio cuerpo portando
guadaña).
En el cuerpo superior, dos flameros delimitan el espacio, de los que salen dos aletones
que enmarcan el templete, sobre los que hay unas figuras reptantes. Las enjutas
formadas en estos aletones se cubren con medallones con jarras de azucenas en
alusión a la Virgen, la cual preside la hornacina avenerada del mencionado templete.
Este espacio es coronado por un entablamento de friso corrido decorado con cabezas de
angelotes, dentículos en la cornisa, rematándose con flameros entre los que se ubica un
óculo que ilumina el coro y sobre éste el Niño Jesús con la bola del mundo.
La portada sur o «puerta chica», la más primitiva, está ligeramente apuntada y
remarcada por dos pequeños baquetones con molduras góticas en basa y capitel, con la
entrecalle decorada con flores cuadrifolias.
En el muro norte se sitúa una pequeña capilla dedicada a la Virgen del Carmen,
realizada en 1899, según se indica en la reja, cuyo espacio albergó con anterioridad el
osario, el cual fue construido a principios del s. XVIII. Esta capilla, a la que se accede por
un vano acarpanelado y con rejería, se enmarca en una doble moldura apuntada
rematada por una cruz. En el interior, se alza la imagen de la Virgen del Carmen dentro
de una hornacina de madera acristalada, encuadrada en una moldura de arco apuntado,
y bajo esta un altar de piedra. A la derecha, una inscripción «Dona esta imagen y sufragó
la redificación de esta capilla D. Inés Mogollón y Mogollón (menor) en mayo del
MCMXLII» en alusión a un cuadro que hubo. El año de creación también se recoge en
una pequeña pila.
Por su parte, la torre campanario sobresale como suave acodo en el muro norte
entre la cabecera y el primer tramo de la nave, donde destaca únicamente la decoración
de bolas que marca la cámara poligonal que da acceso a las campanas. Se remata con
una cornisa de ladrillo y un chapitel. Por su ubicación, aparejo y elementos decorativos,
se infiere que se trata de una obra más antigua que el resto de la iglesia, quizás del
último cuarto del s. XV.
Del s. XVIII es la escalinata y el pretil que acoge la iglesia. Este muro está divido en
dos, siendo el superior constituido por una doble hilera de sillares de granito y el inferior

cve: BOE-A-2025-2287
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