III. Otras disposiciones. COMUNIDAD DE CASTILLA Y LEÓN. Bienes de interés cultural. (BOE-A-2024-6796)
Resolución de 18 de marzo de 2024, de la Dirección General de Patrimonio Cultural, de la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte, por la que se incoa procedimiento para la declaración de Los Barrios de Villanueva de Ávila, en Villanueva de Ávila, Burgohondo y Navarrevisca (Ávila), como bien de interés cultural con la categoría de conjunto etnológico.
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BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Viernes 5 de abril de 2024

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características de la cubierta vegetal, desde bosques de ribera y paisaje granítico típico
de las estribaciones de la Sierra de Gredos, hasta el monte bajo tapizado por piornos,
jaras y plantas aromáticas, con robles y castaños de carácter singular y repoblaciones de
pinos de mediados del siglo XX.
Dada la orografía del terreno, el parcelario es de escasas dimensiones, con
pequeños terrenos cultivables dedicados a cereales, cebada y centeno, y huertas que
aprovechan el agua de las inmediaciones. Estos prados se acotan con cercas de piedra,
en las que abren bocines o portillos de madera para permitir el paso del agua. En casos
concretos estas cercas se suplementan para conformar los típicos almiares.
Los barrios se localizan en zonas alomadas entre arroyos con el agua necesaria para
el regadío y el general servicio de la población, todos ellos independientes pero
comunicados entre sí por una red de caminos –que en algunos casos conservan su
rudimentaria pavimentación– con pequeños bancales y aterrazamientos para permitir
pastos y cultivos, y con cerramientos de mampostería de piedra delimitando sus
propiedades.
El aprovechamiento hídrico de los irregulares cauces de agua fue una prioridad para
su subsistencia, por ello, cada barrio contaba con sus propias fuentes, represas y
canalizaciones de agua. Son numerosas las regueras naturales o artificiales que corren
paralelas a los caminos o lindes de fincas con las correspondientes losas a trechos
regulares para permitir el paso.
Otros de los elementos singulares y comunes a todos los barrios son las eras de uso
particular o comunitarias, que aprovechan grandes lanchas de granito que se delimitan
con cercas bajas de piedra, marcando la zona en la que se trillarán cereales y
legumbres.
El aislamiento de la zona y su economía de autosubsistencia, caracterizan las duras
condiciones de vida originarias de estas poblaciones y la lucha por mejorar en un
esfuerzo común, que han marcado el carácter de colectividad del pueblo de Villanueva.
Cada barrio está formado por una serie de construcciones domésticas, viviendas y
construcciones auxiliares, graneros, guangos, lagares, pajeras, gallineros y establos para
el ganado, que constituían el asiento de un grupo de familias dedicadas a la explotación
del medio, con una economía agro-ganadera y una organización económica y de vida
autónoma e independiente. Algunos de estos edificios son de uso común como pueden
ser el horno, la herrería, las eras, la escuela o la taberna. Tradicionalmente la pesca y el
aprovechamiento ganadero, formaron parte de la dieta de estas poblaciones lo que ha
tenido su reflejo en la configuración de estos asentamientos.
También el cultivo de viñedos constituye una fuente de creciente riqueza. En la
actualidad se han recuperado la totalidad de los que se habían abandonado y se han
llevado a cabo experiencias para recuperar los modos tradicionales de explotación de las
viñas como labrar con burros para obtener una oxigenación más controlada de los
terrenos. Gran parte de la vida de los barrios giraba en torno a la cultura del vino, en
muchas casas había bodegas, y las artesanías del mimbre estaban relacionadas con
esta actividad con la realización de cestos y albardas destinadas a la recolección y
transporte de la uva.
La construcción de los barrios se caracteriza por el uso de muros de piedras en seco,
sin ningún tipo de argamasa. Es común el uso de materiales ligados al territorio, granito
labrado en sillares, en mampuesto o en lajas, madera, helechos y barro. En algunos
casos encontramos grandes moles de piedra granítica aprovechadas para la
construcción, constituyendo la propia piedra el techo o una pared.
La vivienda es de planta rectangular, a la que se adosan las edificaciones auxiliares,
aunque en ocasiones adaptándose al desnivel del terreno encontramos una planta baja
para los animales y una segunda planta de mayor longitud, destinada a vivienda. La
estructura es de muros de carga perimetrales de piedra de granito colocada sin
argamasa; los muros son de mampostería, con piedras de mayor tamaño en los barrios
situados a menor altitud y con piedras menores, en ocasiones casi lajas, en los de mayor
altitud. Exceptuando la puerta y algún que otro ventanuco, no existen apenas huecos.

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Núm. 84