III. Otras disposiciones. COMUNIDAD AUTÓNOMA DE EXTREMADURA. Bienes de interés cultural. (BOE-A-2022-14724)
Decreto 84/2022, de 28 de junio, por el que se declara bien de interés cultural "La Montería y la Rehala en Extremadura" con el carácter de patrimonio cultural inmaterial.
11 páginas totales
Página
Zahoribo únicamente muestra información pública que han sido publicada previamente por organismos oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
Cualquier dato, sea personal o no, ya está disponible en internet y con acceso público antes de estar en Zahoribo. Si lo ves aquí primero es simple casualidad.
No ocultamos, cambiamos o tergiversamos la información, simplemente somos un altavoz organizado de los boletines oficiales de España.
BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
Núm. 216
Jueves 8 de septiembre de 2022
Sec. III. Pág. 124641
cve: BOE-A-2022-14724
Verificable en https://www.boe.es
La montería no es posible sin el concurso de las rehalas. Rehaleros y monteros
forman parte indispensable de la modalidad. Con la introducción de las armas de fuego,
las dos figuras se separan, asimilando al cazador de puesto fijo con el montero, y al
cazador con perro como rehalero.
Los perreros se enfrentan a manchas de diferentes morfologías que tienen que leer
para actuar sobre ellas. Los accidentes geográficos, la vegetación, el tipo de mancha y la
adecuación de su trabajo al territorio, las pistas, los trastos, las querencias, las zonas de
encame, etc, las conoce el perrero, que dirigirá a sus perros hacia las zonas donde
posiblemente estén los animales.
La caza, la montería y la rehala han cambiado en las últimas décadas. La
importancia de la rehala o el hecho de ser uno más en la montería han cambiado a partir
de la comercialización cinegética. Todavía se mantiene esa consideración en muchas
ocasiones, sobre todo en las monterías organizadas por sociedades locales de
cazadores, peñas monteras y monterías de invitación, siendo menor en las cacerías
comerciales.
El trabajo de los perreros tiene su correlación en su forma de vestir y sus accesorios.
La imagen del podenquero la tenemos asociada a los zahones, la caracola y el cuchillo.
Las polainas se utilizan cuando la mancha es muy cerrada para proteger las piernas de
las zarzas, los espinos y las aulagas. Actualmente también se utilizan monos de trabajo
de colores vivos para ser vistos en la mancha. El cuchillo de remate lo llevan los
rehaleros y podenqueros durante la montería, si bien, también lo pueden portar los
cazadores y utilizarlos si entran en un agarre.
La caracola es uno de los elementos característicos de los podenqueros durante las
monterías. En las recovas extremeñas se utiliza también la cuerna, la bocina y el pito de
hueso de buitre. Los perros son llamados y guiados a través del sonido. Por otro lado,
son muchas las expresiones de aliento a los perros recogidas durante el trabajo de
campo.
https://www.boe.es
BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
D. L.: M-1/1958 - ISSN: 0212-033X
Núm. 216
Jueves 8 de septiembre de 2022
Sec. III. Pág. 124641
cve: BOE-A-2022-14724
Verificable en https://www.boe.es
La montería no es posible sin el concurso de las rehalas. Rehaleros y monteros
forman parte indispensable de la modalidad. Con la introducción de las armas de fuego,
las dos figuras se separan, asimilando al cazador de puesto fijo con el montero, y al
cazador con perro como rehalero.
Los perreros se enfrentan a manchas de diferentes morfologías que tienen que leer
para actuar sobre ellas. Los accidentes geográficos, la vegetación, el tipo de mancha y la
adecuación de su trabajo al territorio, las pistas, los trastos, las querencias, las zonas de
encame, etc, las conoce el perrero, que dirigirá a sus perros hacia las zonas donde
posiblemente estén los animales.
La caza, la montería y la rehala han cambiado en las últimas décadas. La
importancia de la rehala o el hecho de ser uno más en la montería han cambiado a partir
de la comercialización cinegética. Todavía se mantiene esa consideración en muchas
ocasiones, sobre todo en las monterías organizadas por sociedades locales de
cazadores, peñas monteras y monterías de invitación, siendo menor en las cacerías
comerciales.
El trabajo de los perreros tiene su correlación en su forma de vestir y sus accesorios.
La imagen del podenquero la tenemos asociada a los zahones, la caracola y el cuchillo.
Las polainas se utilizan cuando la mancha es muy cerrada para proteger las piernas de
las zarzas, los espinos y las aulagas. Actualmente también se utilizan monos de trabajo
de colores vivos para ser vistos en la mancha. El cuchillo de remate lo llevan los
rehaleros y podenqueros durante la montería, si bien, también lo pueden portar los
cazadores y utilizarlos si entran en un agarre.
La caracola es uno de los elementos característicos de los podenqueros durante las
monterías. En las recovas extremeñas se utiliza también la cuerna, la bocina y el pito de
hueso de buitre. Los perros son llamados y guiados a través del sonido. Por otro lado,
son muchas las expresiones de aliento a los perros recogidas durante el trabajo de
campo.
https://www.boe.es
BOLETÍN OFICIAL DEL ESTADO
D. L.: M-1/1958 - ISSN: 0212-033X