BOJA

Boletín Oficial de la Junta de Andalucía
Número 152 - Martes, 6 de agosto de 2024

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Programa Sectorial de Uso Público del Espacio Natural de Doñana

como zorros, ciervos o jabalíes y, ocasionalmente, algún cetáceo o tortuga muertos en alta mar y arrastrados
hacia la orilla.
Destaca también por su singularidad e interesante configuración geomorfológica el Acantilado de El Asperillo,
extendiéndose a lo largo de 25 Km entre las poblaciones costeras onubenses de Mazagón y Matalascañas. En
este acantilado se localizan varios senderos peatonales, muy frecuentados por veraneantes que acceden a la
playa.
Entre Matalascañas y la desembocadura del Guadalquivir se extiende el paisaje de dunas activas o móviles,
pudiéndose considerar el de mayores implicaciones estéticas para las personas que visitan este territorio. En
los primeros dos kilómetros aproximadamente, se dispone de un sendero peatonal, cuyo recorrido va desde
la orilla de la playa a las dunas embrionarias, permitiendo así apreciar varios subsistemas de este paisaje.
Para la contemplación de la avifauna acuática, la marisma es uno de los paisajes más valiosos, supone uno de
los recursos más importantes desde el punto de vista ecológico. En ella se observan especies de aves como
cercetas, gangas, avocetas, garzas, garcetas, moritos, y otras muchas que tienen en este ecosistema su
despensa alimenticia, como son los llamativos flamencos rosas y los ánsares. En la zona norte del Espacio
Natural se cuenta con importantes equipamientos para la interpretación de este paisaje (Centro Ornitológico
Francisco Bernis, C.V. J.A. Valverde...).
Otro de los paisajes singulares de Doñana lo forman las lagunas de Ribetehilos, Acebuche, Huerto y Las
Pajas… Constituido por una interesante zona de turberas, con vegetación singular de este hábitat y formación
palustre permanente. Junto a estas lagunas se disponen de senderos peatonales y observatorios para
disfrutar del paseo y de la contemplación de diferentes especies de aves.
Un poco más al norte, la Zona de Protección del Arroyo de la Rocina, es quizás, uno de los lugares más
singulares y atractivos, formado por un bosque de ribera de especial importancia por su riqueza vegetal,
faunística y valores ambientales. La Rocina ofrece muchas posibilidades para la realización de actividades de
uso público, educación ambiental y turismo de naturaleza. En esta zona también se cuenta con itinerarios
guiados, senderos peatonales, observatorios y centros de visitantes que facilitan el acercamiento de las
personas que lo visitan a los valores naturales y culturales del territorio.
Los denominados “cotos”, son también paisajes representativos de este territorio, formados por matorrales
de composición heterogénea, en los que sobresalen pequeños bosquetes de pino piñonero con pies dispersos
de sabinas. Constituyen el hábitat ideal para pequeños y grandes mamíferos, ciervos, gamos, jabalíes,
meloncillos, zorros, tejones, o incluso linces ibéricos y ofrecen zonas de nidificación ideal para diversas
especies: milano real, águila calzada, águila imperial, cernícalo, rabilargo, etc.
Entre la fauna más representativa de este territorio destaca el lince ibérico. La importancia de conservar el
hábitat de esta especie es el principal objetivo de su conservación. Junto al Sendero peatonal Lagunas del
Huerto y Pajas, se ubica un equipamiento interpretativo y en el que se desarrollará un Programa de
Comunicación y Sensibilización a través de una visita guiada para observar varios ejemplares de lince ibérico.

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Depósito Legal: SE-410/1979. ISSN: 2253-802X

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Los pinares ocupan importantes extensiones en Doñana, en parte consecuencia de la política repobladora
llevada a cabo en los siglos XVIII y XIX. Entre las masas maduras de pinar destacan el Pinar de La Algaida y los
Pinares de Almonte, Aznalcázar e Hinojos, además de los llamados “corrales“, bosques de pinos piñoneros
situados entre dos trenes de dunas móviles.