3. Otras disposiciones. Consejería de la Presidencia, Administración Pública e Interior. (2022/39-45)
Resolución de 22 de febrero de 2022, de la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía en Sevilla, por la que se conceden las Banderas de Andalucía en sus diferentes categorías en la provincia de Sevilla.
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BOJA
Boletín Oficial de la Junta de Andalucía
Número 39 - Viernes, 25 de febrero de 2022
página 3136/3
e) Bandera de Andalucía de la Economía y la Empresa.
Se concede la Bandera de Andalucía de la Economía y la Empresa a la empresa
Piedra Paloma de Pedrera, por los siguientes motivos:
Se funda en el 2009 como comercializadora de materiales naturales. Hasta poco
antes había sido una empresa puramente industrial con el nombre de Segura, S.L., que
extraía el material de cantera para elaborar Carbonato cálcico y que de vez en cuando
extraía bloques de roca ornamental con la marca Piedra Paloma. Pero se le da una vuelta
180º al negocio, guiado principalmente por el CEO Don Francisco Segura y fue entonces
Depósito Legal: SE-410/1979. ISSN: 2253 - 802X
http://www.juntadeandalucia.es/eboja
00256400
d) Bandera de Andalucía de la Solidaridad y la Concordia.
Se concede la Bandera de Andalucía de la Solidaridad y la Concordia a la Asociación
Andaluza para la Defensa de la Infancia y la Prevención del Maltrato-ADIMA, por los
siguientes motivos:
Constituida en 1990 por iniciativa de diversos sectores sanitarios y servicios sociales
principalmente, la meta con la que se inicia es la promoción, atención y buen trato a la
infancia, en la línea de lo suscrito en la Convención Internacional de los Derechos del
Niño y la Niña.
Entre sus objetivos, ADIMA persigue sensibilizar a la sociedad en su conjunto sobre
estos problemas, denunciando casos o situaciones de marginación, maltrato o abandono.
Quiere promover entre los profesionales que trabajan por la infancia una mayor
concienciación y formación respecto a la detección, tratamiento y prevención de casos.
Ya en los años 90 comenzó a trabajar en la prevención, evaluación y tratamiento de
los/as menores víctimas de violencia sexual, acompañando no sólo a nivel asistencial
a estos/as menores, sino también en todo el arduo proceso judicial al que tienen que
enfrentarse los mismos.
Con la aplicación del Protocolo de la Junta de Andalucía para la Evaluación,
Diagnóstico y Tratamiento de menores víctimas de violencia sexual, ADIMA es la entidad
colaboradora encargada de continuar con su labor con los/as menores víctimas de
violencia sexual, pero ya en un marco institucional protocolarizado, donde la coordinación
con los Servicios de Prevención se hace imprescindible y muy positivo.
Durante el confinamiento que hemos padecido debido a la situación de pandemia
del COVID-19 que dio comienzo en marzo de 2020, los servicios sociales, educativos
y sanitarios se vieron suspendidos y en muchas casos quedaron inactivo durante todos
los meses posteriores debido a la falta de recursos y readaptación de las fórmulas
de atención. No obstante, Los/as profesionales de ADIMA, en colaboración con las
técnicos del Servicio de Prevención, siguieron llevando a cabo su labor de intervención y
asesoramiento a los/as menores y sus familiares que lo requerían. En su caso atendieron
telefónicamente de todas aquellas demandas que le llegaban, de todas aquellos/as
menores y familiares que ya estaban siendo atendidos en el programa, así como incluso
situaciones de necesidades psicológicas y sociales que no encontraban respuestas en
otros dispositivos. La atención no sólo se ciñó a las llamadas telefónicas, sino que se
reinventaron rápidamente para poder seguir dando atención telemática a los/as menores
que ya estaban siendo atendidos en el programa.
La implicación, su profesionalidad, su proactividad ante las dificultades y el trato
tan exquisito y cálida con el que trabajan con los NNA, hace que el programa sea un
programa de calidad, con reconocimiento científico de otras instituciones. Durante una
situación mundial compleja, de inestabilidad, donde las situaciones personal nos llegaron
a superar, se crecieron profesionalmente no dejando en ningún momento de poner en el
centro de atención a la infancia de la provincia de Sevilla, dirigiendo todos sus esfuerzos
en dar respuestas y «contener» las emociones que no sólo derivan de una violencia
sexual, si no con la complejidad emocional que ha conllevado vivir una situación tan
inestable y en muchas casos con daños irreversibles en una población tan frágil como
con la que trabajamos.
Boletín Oficial de la Junta de Andalucía
Número 39 - Viernes, 25 de febrero de 2022
página 3136/3
e) Bandera de Andalucía de la Economía y la Empresa.
Se concede la Bandera de Andalucía de la Economía y la Empresa a la empresa
Piedra Paloma de Pedrera, por los siguientes motivos:
Se funda en el 2009 como comercializadora de materiales naturales. Hasta poco
antes había sido una empresa puramente industrial con el nombre de Segura, S.L., que
extraía el material de cantera para elaborar Carbonato cálcico y que de vez en cuando
extraía bloques de roca ornamental con la marca Piedra Paloma. Pero se le da una vuelta
180º al negocio, guiado principalmente por el CEO Don Francisco Segura y fue entonces
Depósito Legal: SE-410/1979. ISSN: 2253 - 802X
http://www.juntadeandalucia.es/eboja
00256400
d) Bandera de Andalucía de la Solidaridad y la Concordia.
Se concede la Bandera de Andalucía de la Solidaridad y la Concordia a la Asociación
Andaluza para la Defensa de la Infancia y la Prevención del Maltrato-ADIMA, por los
siguientes motivos:
Constituida en 1990 por iniciativa de diversos sectores sanitarios y servicios sociales
principalmente, la meta con la que se inicia es la promoción, atención y buen trato a la
infancia, en la línea de lo suscrito en la Convención Internacional de los Derechos del
Niño y la Niña.
Entre sus objetivos, ADIMA persigue sensibilizar a la sociedad en su conjunto sobre
estos problemas, denunciando casos o situaciones de marginación, maltrato o abandono.
Quiere promover entre los profesionales que trabajan por la infancia una mayor
concienciación y formación respecto a la detección, tratamiento y prevención de casos.
Ya en los años 90 comenzó a trabajar en la prevención, evaluación y tratamiento de
los/as menores víctimas de violencia sexual, acompañando no sólo a nivel asistencial
a estos/as menores, sino también en todo el arduo proceso judicial al que tienen que
enfrentarse los mismos.
Con la aplicación del Protocolo de la Junta de Andalucía para la Evaluación,
Diagnóstico y Tratamiento de menores víctimas de violencia sexual, ADIMA es la entidad
colaboradora encargada de continuar con su labor con los/as menores víctimas de
violencia sexual, pero ya en un marco institucional protocolarizado, donde la coordinación
con los Servicios de Prevención se hace imprescindible y muy positivo.
Durante el confinamiento que hemos padecido debido a la situación de pandemia
del COVID-19 que dio comienzo en marzo de 2020, los servicios sociales, educativos
y sanitarios se vieron suspendidos y en muchas casos quedaron inactivo durante todos
los meses posteriores debido a la falta de recursos y readaptación de las fórmulas
de atención. No obstante, Los/as profesionales de ADIMA, en colaboración con las
técnicos del Servicio de Prevención, siguieron llevando a cabo su labor de intervención y
asesoramiento a los/as menores y sus familiares que lo requerían. En su caso atendieron
telefónicamente de todas aquellas demandas que le llegaban, de todas aquellos/as
menores y familiares que ya estaban siendo atendidos en el programa, así como incluso
situaciones de necesidades psicológicas y sociales que no encontraban respuestas en
otros dispositivos. La atención no sólo se ciñó a las llamadas telefónicas, sino que se
reinventaron rápidamente para poder seguir dando atención telemática a los/as menores
que ya estaban siendo atendidos en el programa.
La implicación, su profesionalidad, su proactividad ante las dificultades y el trato
tan exquisito y cálida con el que trabajan con los NNA, hace que el programa sea un
programa de calidad, con reconocimiento científico de otras instituciones. Durante una
situación mundial compleja, de inestabilidad, donde las situaciones personal nos llegaron
a superar, se crecieron profesionalmente no dejando en ningún momento de poner en el
centro de atención a la infancia de la provincia de Sevilla, dirigiendo todos sus esfuerzos
en dar respuestas y «contener» las emociones que no sólo derivan de una violencia
sexual, si no con la complejidad emocional que ha conllevado vivir una situación tan
inestable y en muchas casos con daños irreversibles en una población tan frágil como
con la que trabajamos.
